De prosperar esta nueva solución, el ahorro anual para Castilla-La Mancha superaría los 125 millones de euros a fecha de hoy. En concreto, el gobierno tiene previstos unos gastos financieros durante 2018 de casi 197 millones de euros, una cuantía que supera lo que el gobierno tiene previsto invertir en sanidad, educación, vivienda y servicios sociales juntos. Tan sólo los intereses suponen un coste diario de 530.000 euros. En concreto, el gobierno del presidente García-Page tiene consignadas dos partidas para pago de intereses, una por emisión de valores de deuda que asciende a 54,6 millones y otra por 144,23 millones para los intereses de crédito a largo plazo.
A falta de que se hagan públicos los datos del último trimestre de 2017, los del tercer trimestre, ofrecidos por el Banco de España, recogían que la deuda pública de Castilla-La Mancha ascendía a 14.313 millones de euros, de los que 10.273 eran con el estado a través del Fondo de Liquidez Autonómica. Las previsiones iniciales del ejecutivo eran pedir créditos por 1.897 millones y amortizar 1.469 millones, con lo que el endeudamiento neto para 2017 quedaba fijado en 428 millones. La cifra exacta al cierre del ejercicio se conocerá a finales de mes.
A lo largo de este año, el gobierno regional espera ingresar 1.908,38 millones de euros en créditos y confía en conseguir ese dinero a través de los mecanismos extraordinarios de financiación, en concreto a través del Fondo de Liquidez Autonómica. Será el Ministerio de Hacienda el que facilite a la Junta el acceso a un dinero, a una liquidez, que de otra manera le sería difícil conseguir y de obtenerla sería a un precio más elevado.
La cifra de intereses que deberá pagar la Junta en el caso de que no prospere la nueva propuesta del Ministerio irá en aumento en los próximos dos años, no sólo por el incremento de la deuda neta, también por el nuevo escenario financiero marcado por los cambios de la política monetaria de la zona euro que afectan a la retirada de compra de valores de deuda soberana por parte del Banco Central Europeo y al encarecimiento del precio oficial del dinero, lo que hará subir los costes de intereses. De hecho, ayer mismo el tesoro público captó fondos para financiar a las diferentes administraciones a unos tipos de interés más alto. Esos fondos son los que luego se prestan a las Comunidades a través del Fondo de Liquidez.
Durante 2017 el gobierno central inyectó a las Comunidades Autónomas 29.000 millones de euros de liquidez a través de los diferentes mecanismos, para que pudieran atender a los pagos a proveedores y vencimientos de deuda, en el primer trimestre de 2018 está previsto que libre 12.151,8 millones de euros.
De esos 12.151,8 millones, Castilla-La Mancha recibiría 541,93 millones de euros. Durante el primer trimestre de 2017, nuestra Comunidad recibió 343,8 millones en préstamos del Estado a través de este mecanismo de liquidez, lo que indica que las necesidades de financiación en 2018 crecen en el primer trimestre en casi 200 millones de euros (57,63%).
Durante 2017 el gobierno del presidente García-Page necesitó 1.846,9 en créditos del Estado, que no podría haber conseguido en el mercado o que hubiera elevado en exceso la ya elevada partida de intereses a pagar.
Desde 2012, nuestra Comunidad ha recibido del estado préstamos por valor de 14.735 millones de euros. Este dinero le ha ido permitiendo, además de atender el pago de proveedores, reestructurar la naturaleza de sus créditos, perdiendo peso los que mantenía con entidades y aumentando los que tiene con el Ministerio.
El valor de la deuda viva de las Comunidades Autónomas con el Estado supera los 155.000 millones de los 232.000 millones que el gobierno central les prestó desde la puesta en marcha de los mecanismos extraordinarios de financiación. Nuestra Comunidad es la cuarta que más fondos ha recibido, 14.735 millones, por detrás de Cataluña (70.909,6 millones), Valencia (53.756,6) y Andalucía (35.050). Serán pues estas cuatro regiones las más beneficiadas de la condonación de los intereses.
La Junta de Castilla-La Mancha tiene previsto suscribir nuevos préstamos a razón de 5,23 millones diarios durante 2018. Castilla-La Mancha es la segunda Comunidad con mayor endeudamiento financiero regional en relación a su riqueza (PIB).
El gobierno regional hasta el momento no ha informado del impacto que tendría en las cuentas públicas esta medida y a dónde se destinarían esos fondos que se ahorraría nuestra Comunidad con la medida del Gobierno central.
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