El empleo que se crea en la región es asalariado, mientras se destruye el de autónomos

La EPA considera como trabajadores no asalariados a los empresarios y trabajadores independientes (autónomos), que representan el grueso de los resultados. A ellos añade a los trabajadores estacionales, ocasionales o discontinuos por cuenta ajena en la época de menor actividad que no hayan trabajado en la semana de referencia en la que se elabora la Encuesta.

Más de la tercera parte de esa pérdida de empleo no asalariado se produjo en los meses de abril, mayo y junio pasados. De los 9.000 empleos perdidos en la región durante el trimestre pasado, 7.000 fueron de trabajadores autónomos.

La mayor destrucción de empleo no asalariado en los últimos quince meses se produce en el sector servicios, que registra 13.000 ocupados menos a finales de junio respecto a marzo de 2018. La industria tiene 6.200 asalariados menos, la agricultura 3.000 y sólo crece el número de trabajadores no asalariado en la construcción, con 2.000 nuevos ocupados.

En total en Castilla-La Mancha hay 139.600 trabajadores no asalariados, de los que 25.200 están en el sector agrícola, 14.300 en la industria, 20.100 en la construcción y 80.000 en los servicios. A finales de junio la industria y los servicios tenían la cifra de ocupados no asalariados más baja de los últimos tres años y además presentaban la peor relación sobre el total de ocupados del sector en esos mismos años

En total el trabajador no asalariado representa el 17% del total que se da en la Comunidad y hace quince meses llegó a tener una proporción del 20,5%. Dicho de otro modo la relación ha pasado de uno de cada cinco ocupados a uno de cada seis. Por sectores, el 47% de los ocupados en el campo trabajan por cuenta propia, el 10,3% en la industria, el 29,3% en la construcción y el 14,3% en los servicios.