Por todo ello, el pasado mes de mayo se efectuaron dos registros en domicilios colindantes, donde se localizó una plantación en el sótano de uno de ellos, a la cual se accedía a través de un agujero oculto bajo el sofá del salón. En total los agentes intervinieron 144 plantas, 103 plantones y tres kilos de esta sustancia ya recolectados.
Finalmente, la Policía madrileña procedió a la detención de cuatro personas como presuntos responsables de un delito contra la salud pública y un delito de defraudación de fluido eléctrico. Se trata de jóvenes de 19, 23, 26 y 27 años, tres españoles y un portugués, y dos de ellos con antecedentes.