La asociación de empresas también ha denunciado que los distribuidores minoristas pueden incumplir las obligaciones sectoriales y sus costes asociados por la falta de mecanismos de control de su actividad, al importar el producto en lugar de comprar a un operador mayorista.
UPI explica que se trata de una anomalía regulatoria que les permite vender a otros distribuidores sin estar sometidos a las mismas obligaciones legales que los operadores mayoristas y sin que existan mecanismos de control de su actividad, lo que cree que supone una "competencia desleal" hacia los operadores al por mayor sin capacidad de refino, como las compañías asociadas de UPI.
Por todo ello, se ha dirigido a los distintos organismos competentes para proponer medidas como establecer mecanismos eficientes de control en los ámbitos sectorial y fiscal, que sirvan para erradicar ese fraude.