Los agentes, según ha informado el instituto armado, observaron que el aparato de control de horas de descanso y conducción (tacógrafo digital), se encontraba insertada una tarjeta de conductor que no se correspondía con la identidad del conductor del vehículo en ese momento.
Dado que el conductor se encontraba realizando un transporte de mercancías utilizando la tarjeta de otro conductor, circunstancia que constituye una manipulación del control de horas de descanso y conducción al simular que el vehículo está siendo conducido en ese momento por una tercera persona, se procedió a pasar aviso al Equipo GIAT del Subsector de Tráfico de la Comandancia de la Guardia Civil de Cuenca, el cual procedió a la investigación del conductor del vehículo por un delito de falsedad documental al simular un documento en todo o en parte, de manera que induzca a error sobre su autenticidad.
Dicho conductor podría enfrentarse a penas que oscilan entre los tres a seis años de prisión y de multa de seis a veinticuatro meses.