Garde es el presidente de la Comisión de Investigación del órgano de los rectores españoles desde hace dos años, mandato que, tal y como ha confirmado en la conversación, ya se da por prorrogado automáticamente por otros dos ejercicios.
Al respecto, ha admitido que todavía no se da por satisfecho con el trabajo realizado, ya que los mecanismos que rodean el acceso a la financiación para la investigación "son poco flexibles".
Así, asegura que la gestión de fondos es "compleja" e incluso ha llegado a "colapsar" el trabajo de las universidades españolas.
Aunque sí admite que la financiación estatal "se ha incrementado bastante", algo que es un avance, añade que "no ha sido una época buena para los cambios".
Sí que ha sacado pecho por haber sumado en la reivindicación de fusionar los ministerios de Ciencia y Universidades, algo que no ha vendido como logro particular, pero que ha celebrado, toda vez que "entre el 70 y el 77% de la investigación se da en las universidades".
El reto para los dos años que restan en esta responsabilidad pasa, según Garde, por conseguir reducir la burocracia a la que están sometidos los investigadores, algo "fundamental" y que ya ha trasladado a la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant.