A finales del mes de julio, el Pleno del Congreso de los Diputados rechazó los objetivos de estabilidad presupuestaria y de deuda pública para el conjunto de las administraciones, que es el primer paso para la aprobación de las cuentas públicas, tras el inesperado voto en contra de Junts.
El ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, ya ha deslizado públicamente que el Gobierno volverá a presentar los mismos objetivos de estabilidad presupuestaria para el conjunto de administraciones públicas, defendiendo que se trata de una propuesta "muy sensata y muy positiva" para las comunidades autónomas y los ayuntamientos.
Con todo, Sánchez ha confirmado que el Gobierno "trabajará por la aprobación de unos Presupuestos Generales del Estado que lleven el ADN, la marca y el sello del Ejecutivo de coalición progresista". "Unos Presupuestos sociales, ambiciosos, que consoliden y expandan la inversión pública que venimos a hacer", ha enfatizado Sánchez, que ha despejado así las dudas acerca de que el Gobierno hubiera renunciado a la presentación de las cuentas del próximo año.