Dicho esto, ha informado de que por la oficina de atención a las víctimas ya han pasado "todos los que tenían que pasar", cuantificando en 400 las familias y en 320 las resoluciones adoptadas.
"Se están tramitando ayudas y se está canalizando la privada que ha sido cuantiosa también y lógicamente a partir de ahí tendremos que seguir trabajando en la recuperación de la infraestructura pública, de los daños que se han producido también en la agricultura, de multitud de cosas que están ahí y que literalmente formarán parte de nuestra agenda prioritaria como gobierno", ha subrayado el presidente regional.
En este contexto, García-Page ha dicho que le gustaría que en este país, "cuando nos serenemos", se pueda establecer "una lección de lo que ha pasado". "Siempre hay cosas que mejorar: procedimientos, protocolos, sistemas", ha comentado.
"El peor homenaje para los fallecidos es que además del dolor que han sentido sus familias y todos nosotros, encima no se aprendiera de lo que ha pasado. Hay que tener esa actitud de humildad".
Así, ha recalcado que "la realidad es que aquí estuvimos donde había que estar y a lo que había que estar", lo cual "no garantiza que todo tenga que salir bien", pero "es importante para la sociedad saber que finalmente quien tiene la responsabilidad hace todo lo que puede". Y esto, "particularmente en esta tierra", a un mes de esta "enorme tragedia", lo "podemos decir para orgullo compartido".