Desde la organización de la prueba apuntan que los dos proyectos ganadores han destacado por su enfoque innovador, su integración con el entorno y su apuesta por la reutilización y revitalización del patrimonio construido. Ambos centros castellanomanchegos optan a ganar el premio de la fase nacional, que asciende hasta los 1.000 euros y que se resolverá el próximo 6 de junio. De hecho, el IES Albasit obtuvo este galardón en la categoría de ESO el pasado año.
En la fase local, los equipos finalistas en la categoría de secundaria han presentado los proyectos “Café & Motion”, de IES Albasit, y “Centro multicultural de ocio: Merced”, del Colegio Nuestra Señora de la Merced en Tarancón (Cuenca). En el caso de bachillerato, el IES Blas de Prado-Camarena de Toledo y el IES Cañada de la Encina de Iniesta (Cuenca)han logrado su pase a la final con los proyectos “Rehabilitación sostenible Bargas” y “Casa rural El Vagón”, respectivamente.
La olimpiada refuerza el papel de la Ingeniería de Edificación como motor de sostenibilidad urbana. Su organización forma parte del compromiso de la universidad con la difusión de la cultura científica y la innovación entre los más jóvenes.