Lejos de ser un pasatiempo menor, los videojuegos se consolidan como la forma de ocio preferida para el 79% de los gamers castellanomanchegos, superando en más de 20 puntos la cifra registrada el año anterior. Para muchos, el juego se ha convertido en una herramienta de desconexión emocional, ya que el 51% afirma que recurre a ellos como vía de escape frente al estrés diario.
Percepción vs. realidad: la brecha entre lo que piensan y lo que son
Aunque el perfil del gamer ha evolucionado hacia una figura más adulta, activa y sociable, la percepción social sigue anclada en estereotipos. El 81% de los jugadores manchegos reconoce que aún sigue existiendo una imagen preconcebida sobre quién juega a videojuegos, y el 37% cree que las personas que juegan a videojuegos siguen siendo adolescentes que pasan muchas horas al día con la consola.
Esta visión choca frontalmente con la realidad que los propios jugadores manchegos describen, en la que la gran mayoría no se identifica con esa imagen de jugador solitario y más de la mitad (54%) afirma tener una vida social activa y jugar en su tiempo libre.
También existen aún diferencias entre lo que significa ser gamer y lo que algunos sectores creen que implica. El 28% de los encuestados en Castilla-La Mancha no considera gamer a quienes juegan desde el smartphone, a pesar de que esta plataforma es cada vez más relevante, especialmente entre adultos. Sin embargo, la realidad del sector ya es mucho más amplia e inclusiva y 2 de cada 3 gamers manchegos entiende el gaming sin limitaciones de edad y el 60% lo define como una actividad diversa y accesible para todos.
“Durante los 20 años que llevamos acompañando y escuchando a los jugadores de videojuegos de nuestro país, hemos vivido desde cerca cómo el gaming se ha integrado de forma natural en la vida adulta. Cada vez son más los jugadores que compaginan esta afición con sus responsabilidades personales y profesionales, y eso es algo que percibimos día a día y que confirma ahora la quinta edición de nuestra Radiografía del Gaming.” señala Eugenio Pérez, responsable de marca y PR de PcComponentes. “Los jugadores y las jugadoras crecen con su afición, y cuando un profesional o una madre te cuenta que juega para desconectar del día a día o compartir tiempo con seres queridos, queda claro que el gaming ya no es solo una actividad de ocio, sino una parte importante de su vida”, completa Eugenio Pérez.
Más allá del juego: el 93% de los gamers manchegos reconoce beneficios reales en su vida
El gaming se consolida como una actividad con impacto real en el desarrollo personal, ya que el 93% de los gamers en Castilla-La Mancha asegura que jugar ha mejorado alguna de sus habilidades, especialmente la coordinación (51%), la lógica (44%) y la toma de decisiones y rapidez mental (42%). Además, uno de cada cuatro lo considera un estímulo intelectual que pone a prueba su destreza y agilidad mental.
A esta dimensión formativa se suma una fuerte fidelización. El 49% de los manchegos encuestados lleva más de diez años jugando y el 70% prevé seguir haciéndolo en la próxima década, lo que confirma el arraigo del gaming en la vida adulta y su papel como fenómeno cultural con largo recorrido.