De enero a junio han muerto 21 personas trabajadoras, tres más que en 2024, año en el que ya hubo un destacado repunte de fallecimientos respecto a 2023.
Para UGT también resulta preocupante la evolución de los accidentes in itinere. De los 957 que hubo en los seis primeros meses de 2024 se ha pasado a los 1.022 en 2025, un incremento del 6,7%. Esta situación resulta más grave al comprobar que el aumento de las tres víctimas mortales se ha dado en el apartado de los accidentes in itinere.
Aunque paulatinamente Castilla-La Mancha sigue reduciendo su índice de incidencia de accidentes laborales --aquel que mide el porcentaje de accidentes por cada 100.000 personas ocupadas--, la región se mantiene como la cuarta región española con mayor índice, siendo Cuenca y Guadalajara las provincias del país que encabezan el ranking.
Por provincias, los accidentes laborales subieron en Albacete, un 7,5%; y en Ciudad Real, un 1,9%. Bajaron en Guadalajara, un 7,7%; en Toledo, un 7,3%; y en Cuenca, un 3,6%. Donde más fallecimientos hubo fue en Cuenca, un total de 7, 6 más que en 2024; 6 hubo en Toledo; 4 en Guadalajara; 2 en Albacete; y 2 en Ciudad Real.
Aunque el Acuerdo Estratégico de Prevención de Riesgos Laborales 2022-2026 está contribuyendo a que cada vez más empresas hagan suya la cultura preventiva y no sin antes recordar que son las empresas las que tienen la obligación de proteger la seguridad y salud de las personas trabajadoras, UGT Castilla-La Mancha demanda dar más pasos para seguir reduciendo la siniestralidad laboral y, sobre todo, para que ninguna persona pierda la vida al ir a su puesto.
Insiste en que es necesario dotar de más recursos humanos y materiales a la Inspección de Trabajo para que controle el cumplimiento de las normas y para que investigue y depure responsabilidades.
También pide la puesta en marcha de la figura del delegado territorial de prevención para llegar a aquellas empresas que no cuentan con representación sindical. Estas empresas son -precisamente- la que sufren más accidentes laborales.