El líder socialista toledano ha calificado de “absolutamente impensable” e incluso “indignante” la actitud de Núñez, subrayando que “es un regalo, una oportunidad histórica que podría destinarse a miles de necesidades y a los servicios esenciales que se prestan en pueblos pequeños”, y ha recalcado que la postura del PP solo responde al “seguidismo y la falta de liderazgo” de su presidente, “que no se atreve a enfrentarse a sus jefes en Madrid ni a defender los intereses reales de Castilla-La Mancha”.
Gutiérrez se ha preguntado qué credibilidad tiene “quien exige constantemente servicios y recursos para Castilla-La Mancha, pero luego rechaza el mayor alivio financiero que ha tenido nunca esta tierra, simplemente por agradar a Génova y no molestar a la dirección nacional de su partido”.
Ha recordado además que el perdón de la deuda permitiría “ahorrar más de 750 millones de euros solo en intereses en la próxima década” a la comunidad autónoma y que los criterios elegidos por el Estado para esta condonación atienden, precisamente, a las reivindicaciones históricas de la región, como la despoblación y la dispersión de la población.
El secretario provincial socialista ha lamentado que con esta actitud “el señor Núñez está haciendo daño directo a los pueblos más pequeños, a la Castilla-La Mancha rural y a todas las personas que dependen de unos servicios públicos de calidad”.
Y ha añadido que “no se puede exigir mejoras con una mano y, con la otra, oponerse a una medida que solo traería ventajas para nuestra tierra”.
Para finalizar, Álvaro Gutiérrez ha pedido al PP de Castilla-La Mancha “que se lo haga mirar” y deje de “hacer la gracieta oponiéndose a una quita que se debe, precisamente, a la deuda generada por su propia jefa, María Dolores de Cospedal, durante cuatro años de triste recuerdo para esta región”.