M.G.J. había sido atendida en el Centro de Salud del Polígono de Toledo el día 28 de enero de 2017. Siempre según el escrito de acusación, la acusada M.R.V., para acceder a la cita de historia clínica, utilizó el usuario, a pesar de que M.G.J. no había dado autorización ni consentimiento alguno a M.R.V. para consultar sus datos médicos obrantes en soporte informático.
Para el ministerio Fiscal, los hechos relatados son constitutivos de un delito contra la intimidad por los que procede imponer a la acusada la pena de dos años, seis meses y un día de prisión -como accesoria inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena- y multa de veinte meses, con cuota diaria de 12 euro y responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago de un día de privación de libertad por cada dos cuotas diarias no satisfechas. Asimismo solicita una pena de inhabilitación absoluta por tiempo de ocho años.