Los agentes en el lugar confirmaron que las lesiones del peatón eran compatibles con un atropello, solicitando el apoyo del Grupo de Investigación y Análisis de tráfico (GIAT) del Sector de Tráfico de Castilla- La Mancha, con el fin de esclarecer los hechos.
En el lugar, los agentes del GIAT pudieron recuperar diversos restos del vehículo implicado, lo que permitió identificar la marca y modelo con exactitud e iniciar una búsqueda de vehículos con características similares en las localidades cercanas al lugar del accidente. El turismo fue hallado en un taller mecánico cuando iba a ser reparado, comprobando que los daños que presentaba eran compatibles con un atropello.
Su conductor ha sido investigado por un delito contra la seguridad vial al haber abandonado el lugar del accidente y otro delito de conducir sin tener permiso en vigor.
La Guardia Civil y la Dirección General de Tráfico recuerdan que, ante cualquier accidente, es obligatorio detenerse y socorrer a las personas heridas, garantizando su seguridad y la propia hasta la llegada de los servicios de emergencias. El abandono del lugar del accidente constituye un delito grave tipificado en el Código Penal con penas de prisión de hasta cuatro años y retirada del permiso de conducir de hasta seis años.