En el caso de que el corte sufrido sea inferior a cuatro horas, los frigoríficos pueden mantener la temperatura de los alimentos por debajo de los 5ºC, con lo que no sería necesario desechar ningún alimento como consecuencia del apagón.
Situación distinta se produce si el corte del suministro eléctrico es superior a cuatro horas. En estos casos, y ante la posibilidad de que se haya superado la temperatura de los 5ºC es recomendable tirar aquellos alimentos perecederos como carnes, pescados, huevos, leche, queso fresco o sobras.
No es necesario desechar sin embargo las frutas y las verduras enteras, ya que pueden mantenerse a temperaturas superiores, por lo que se pueden consumir si mantienen sus condiciones de frescura. Es importante, además, seguir las recomendaciones habituales para su lavado. En el caso de frutas y verduras cortadas o ensaladas preparadas, es recomendable actuar como con los alimentos perecederos.
Los alimentos no perecederos que no necesitan refrigeración, como refrescos, conservas, bebidas alcohólicas o chocolate, pero que suelen almacenarse en el frigorífico, pueden consumirse sin inconvenientes.
Alimentos en el congelador
En cuanto a los alimentos conservados en los congeladores, es importante destacar que estos electrodomésticos pueden mantener la temperatura de congelación al menos 24-48 horas si no se abren las puertas. Además, si los alimentos no se han descongelado completamente se pueden volver a congelar.
Es importante resaltar que si el corte es de más de 24 horas es importante comprobar que los alimentos no se hayan descongelado completamente. Si no se tiene claro cuánto tiempo han estado descongelados, los alimentos deben desecharse, particularmente si no están fríos al tacto.