Así se lo trasladará la ministra a los diferentes consejeros de las comunidades autónomas en el marco del Consejo de Política Fiscal y Financiera que se celebrará mañana en el Ministerio. Además de este planteamiento, Montero también informará a las comunidades autónomas sobre el techo de gasto que aprobará el Consejo de Ministros en su reunión de este martes, el primer paso para aprobar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el año que viene.
Ambas medidas marcan los límites a las Comunidades Autónomas para la elaboración de sus propios presupuestos. Para 2022 el déficit de las Comunidades no debería sobrepasar el 0,6%. Esta barrera se puso a modo de referencia dado que las reglas fiscales están suspendidas. La propuesta para el año que viene rebajaría a la mitad el límite de déficit.
Al reducirse la posibilidad de financiación extraordinaria, se limita asimismo la capacidad de endeudamiento y el nivel de gasto de las Comunidades. En 2022 el techo de gasto de Castilla-La mancha es de 7.577 millones de euros y las previsiones es finalizar el ejercicio con una deuda de 15.834 millones de euros y un déficit de 289 millones de euros.
Esta última cuantía se reducirá notablemente en 2023 de rebajarse el listón del déficit al 0,3% del PIB, máxime teniendo en cuenta las previsiones de desaceleración de la economía para el último trimestre de 2022 y el priero de 2023