Así lo ha avanzado este lunes a preguntas de los medios durante el acto de presentación de su cargo, en el que ha estado acompañada por el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz.
Tras citar que en los últimos meses se ha producido un incremento importante de la plantilla, "alrededor de 1.200 personas que van a ayudar a enfrentar los picos que surjan", la nueva directora sitúa algunos de los problemas de Urgencias en "la gran demanda de atención, la coordinación interna entre las altas, los ingresos, la gestión de ambulancias y especialmente para las entradas y salidas del hospital del Valle".
Ha señalado que vuelve "con mucha ilusión" tras once años de andadura en el Hospital Nacional de Parapléjicos, con la idea de establecer una mejor organización en el Complejo Hospitalario de Toledo, siguiendo las líneas del Plan de Salud de Castilla-La Mancha Horizonte 2025.
Fomentará "la docencia y la formación, tanto para el desarrollo profesional como para la retención y la atracción del talento", así como la investigación y la innovación, que a su juicio, "tienen que calar en la cultura del hospital" como garantes de su futuro.
Abogará por "el empoderamiento de los pacientes, el autocuidado, la continuidad asistencial, la mejora de la calidad y la seguridad del servicio que presta el centro, con la idea de seguir intentando "referenciar más la cartera del hospital, tanto a nivel regional como a nivel nacional".
Tendrá en cuenta "el desarrollo de la tecnología, los sistemas de información, la digitalización y todas las técnicas y los instrumentos que pueden ayudar en los próximos años" para "subir al tren de revolución de la medicina, concretamente en el desarrollo de la medicina personalizada".
Asimismo, se marca como reto "establecer las instalaciones fijas que acojan de manera permanente al grado de Medicina".
RESPALDO DEL CONSEJERO
El consejero de Sanidad ha respaldado el acto y primeramente ha agradecido la labor de Juan Blas, director gerente saliente, remarcando que fue uno de los artífices del traslado poniendo "calidez y calidad" en los momentos difíciles del complejo hospitalario.
Así, ha dado la bienvenida a Alanzuela a "una casa totalmente renovada", al tiempo que ha afirmado que después de que hayan pasado tres años desde que el nuevo hospital se abrió, se han materializado ya un millón de consultas, más de 300.000 urgencias y más 28.000 intervenciones quirúrgicas.
También, ha reseñado la apertura reciente del Servicio de Medicina Nuclear y de Oncología Radioterapia y Radiofísica, que han hecho ya posible que se atiendan a 3.000 personas en este servicio, con casi 30.000 sesiones de radioterapia.
"Se enfrenta Sagrario y todo su equipo a una situación mejorada sin duda, pero con mucha capacidad de ser Toledo la referencia para toda la región", ha remarcado Fernández Sanz, que ha recordado que en cuanto a recursos humanos, en este complejo trabajan casi 1.600 personas más que las que trabajaban en 2015.
Se suma la formación posgrado del centro con "más residentes", y también el pregrado, siendo 2023 el primer año en tercer curso en el que se va a formar a "los que van a ser los médicos del futuro". Estudiantes de Albacete, Ciudad Real y de otros lugares de España que estaban cursando tercero han elegido Toledo, por lo que ahora ya son 20 alumnos en pregrado.
Preguntado por las gestiones con la Consejería de Fomento para fijar una parcela que pueda ayudar a ampliar el aparcamiento del hospital, ha remarcado que se "están negociando" esta cuestión en "muy buenas circunstancias" para que se materialice en "un futuro inmediato".
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