Durante el mes de noviembre, mes idóneo para la recolección de níscalos en la provincia, el Seprona, junto con las patrullas de Seguridad Ciudadana, pusieron especial énfasis en la prevención de actuaciones ilegales en la recolección y comercialización de este tipo de producto, consecuencia del riesgo que puede llegar a suponer la recogida de estos hongos cuando no se realiza ningún control sanitario, según ha informado el Instituto Armado en nota de prensa.
Como consecuencia de esta labor preventiva y gracias a la colaboración ciudadana, la Guardia Civil ha intervenido un total de 1.450 kilogramos de níscalos. Por otra parte, son diez las personas investigadas por la recolección de este producto, por lo que se les atribuye un delito de hurto, además de la denuncia administrativa comunicada a la Delegación Provincial de la Consejería de Sanidad de la Junta. Además, hay otra persona más investigada, en este caso por la compra de estos hongos sin control sanitario y su posterior venta a otras empresas.
Los productos intervenidos en algunos casos han sido devueltos a los titulares de los montes, que ostentan la propiedad de los recursos forestales que allí se producen, y en otros casos en los que no se ha podido determinar la procedencia han sido puestos a disposición de la Delegación Provincial para su destrucción al carecer de trazabilidad que pueda acreditar la seguridad alimentaria.
Las setas juegan un papel fundamental dentro de los ecosistemas forestales, siendo necesario mantener un adecuado equilibrio entre el carácter comercial de este hongo y su conservación como parte de la biodiversidad y de la riqueza micológica del entorno, motivo por el cuál su actividad está regulada, marcándose además las pautas sanitarias para su comercialización alimentaria.
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