La Guardia Civil, según ha informado en nota de prensa, recibió aviso de varios usuarios que circulaban por la autopista AP-36 y observaron como un vehículo circulaba en sentido contrario.
Agentes de la Guardia Civil de Tráfico que se encontraban por ese tramo de la vía realizando un control preventivo centrado en la vigilancia de los excesos de velocidad, identificaron al conductor que había recorrido más de 2,5 kilómetros en sentido contrario.
Por todo ello, se instruyeron diligencias por un presunto delito de conducción temeraria. Dicho conductor puede enfrentarse a penas de prisión que pueden ir de 6 meses a 2 años y, en cualquier caso, la privación de derecho a conducir de 1 a 6 años.