El gasto en inversiones y los menores ingresos del Estado por la liquidación de ejercicios anteriores eleva el déficit presupuestario de la Junta a 230 millones
jueves 05 de septiembre de 2019, 23:36h
El déficit del gobierno regional en términos presupuestarios se situó a finales de julio en 230 millones de euros, un 48,7% más que en el mismo mes del año pasado. Castilla-La Mancha tiene en 2019 el presupuesto prorrogado de 2018. El incremento del déficit del saldo presupuestario obedece a un aumento en el gasto de inversión, que es del 66,4% respecto al año anterior, mientras que la Hacienda Pública ha logrado contener el gasto corriente que sólo crece un 3,38%.
En conjunto, el gasto de la Comunidad crece un 5,78% mientras que los ingresos lo hacen en un 3,91%. El aumento de los gastos corrientes se debe fundamentalmente al incremento de las subvenciones y transferencias que crecen en términos interanuales un 12,03% y al capítulo de las retribuciones del personal, que sube un 6,2%. En cambio, el gobierno logra frenar el gasto en compra de bienes y servicios, que cae un 12,78% y ve cómo los cambios en el mercado financiero le permiten reducir el pago de intereses y gastos un 9,58%.
En los estados de ingresos aumentan las principales partidas, excepto las de actos jurídicos documentados y los fondos de garantía de los servicios públicos, que se resienten con fuerza, igual que las que se corresponden con la liquidación de algunos tributos y fondos de años anteriores, como el Fondo de Cooperación, que cae en 191 millones, la liquidación por IRPF que retrocede 71 millones o el de algunos tributos especiales, como el de hidrocarburos (6,3 millones de euros).
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