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La propuesta de retirar los teléfonos a los pacientes covid para lograr más derivaciones hacia el Zendal, criticada por su “falta de humanidad”

La propuesta de retirar los teléfonos a los pacientes covid para lograr más derivaciones hacia el Zendal, criticada por su“falta de humanidad”

  • La propuesta de la directora del hospital de Alcalá, que fue número dos de la sanidad en la época de Cospedal, levanta las críticas en nuestra Comunidad

jueves 04 de febrero de 2021, 18:50h

“Es una enfermedad que se agrava con la soledad, que te deja aislada de los tuyos mientras no sabes si vas a superar la neumonía o si de un momento a otro vas a empeorar. Si algo me ayudó a mantenerme con ánimo durante mi ingreso en el hospital por Covid fue el teléfono. Me permitía tener el contacto con los míos, sentirlos cerca”. La afirmación es de una abogada de Castilla-La Mancha que todavía lucha contra las secuelas del Covid, aunque ya desde su domicilio. Se siente sorprendida por la falta de empatía que traduce la noticia de que la directora gerente del Hospital Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares, Dolores Rubio, propusiese esa medida en una reunión. Y que hiciera esa sugerencia porque las comunicaciones de los enfermos con los pacientes estuviesen incidiendo negativamente en el traslado voluntario de pacientes al hospital madrileño de pandemias Isabel Zendal: “Es una medida que no tiene la más mínima humanidad”.

“La tristeza se convertía en esperanza, la soledad en compañía, la angustia en algo más de serenidad. No entiendo que a alguien se le pueda ocurrir eso. El teléfono me ayudó y mucho. Me permitió estar informada de lo próximo y de todo lo que me interesa. Me permitió, también estar entretenida y ocupar la cabeza. Me permitió luchar con más ánimo contra la enfermedad”. El testimonio de la abogada castellano-manchega está alejado de la discrepancia política que ha generado la noticia y muestra sólo la opinión al margen de ese debate. No entiende que la propuesta formara parte de una decisión para tratar de gestionar la atención sanitaria desde un modelo sanitario encaminado a derivar pacientes de unos centros a otros.

Y ese modelo ha sido el que ha provocado el choque en Castilla-la Mancha. El gobierno regional viene siendo criticado desde la oposición por no abrir el nuevo hospital de Toledo. Desde Sanidad, creen que es preferible mantener a los pacientes en los centros tecnológicos bien dotados y con profesionales adecuados antes que desnudar estos hospitales para tratar de poner en marcha el nuevo centro sanitario.

La noticia de las artimañas de la gerente del Hospital Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares, ha provocado que el gobierno castellano-manchego se reafirme en su modelo de gestión hospitalaria y ha abierto la puerta a la crítica desde los partidos políticos de Castilla-La Mancha. Desde el PSOE se ha contrapuesto el modelo del presidente García-Page al de la presidenta Ayuso, destacando la falta de humanidad y sensibilidad que traslada la noticia de retirar los teléfonos a los pacientes para no interferir en los planes de derivación de pacientes al Zendal:

“Es grave no solo por lo que moralmente nos puede revolver el estómago, sino porque la directora de ese hospital fue la número 2 de la Consejería de Sanidad con Cospedal. Si hubiera ganado Cospedal sería la que hoy estaría dirigiendo la lucha contra la pandemia en Castilla-La Mancha, la directora general de Salud Pública, Dolores Rubio”, Las palabras son del diputado nacional y secretario de organización de los socialistas castellano-manchegos, Sergio Gutiérrez.

El patinazo de la que fuera número dos de la sanidad castellano-manchega y que hoy dirige la gerencia del hospital de Alcalá ha llevado al número dos de los socialistas de nuestra Comunidad a pedir al presidente del PP que se pronuncie y se ha preguntado en voz alta: “¿Ese es el modelo que usted querría para Castilla-La Mancha? ¿El de Madrid? Tantas veces que lo ha afirmado”, “¿Esa es la política humanitaria del PP?”

Gutiérrez también se ha dirigido a los ciudadanos y ha señalado: “Imagínense ustedes que sus padres, sus abuelos, son ingresados en un hospital público y les roban el móvil para que no se puedan poner en contacto con ustedes para no decidir trasladarse a un hospital, el Zendal, que hace aguas también por todos lados” y, “por no tener, no tiene ni comida digna”.

La polémica se produce además, en un momento en el que el PP castellano-manchego mira también al modelo de restricciones de Madrid y pide al gobierno regional que tome esas medidas, entre las que están la apertura de los establecimientos de hostelería con ciertas limitaciones.

La decisión de la que fuera número dos de la sanidad castellano-manchega durante la época de Cospedal ha ocasionado una situación controvertida para sus compañeros de Castilla-La Mancha

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