Tras esta suspensión está el pulso trasladado desde los municipios al gobierno regional sobre la mala acogida que la nueva figura fiscal había tenido en buena parte de los pueblos de la Comunidad
La nueva figura fiscal conocida técnicamente como “canon medioambiental de la Directkiva Marco del Agua (DMA)” se creó como tributo propio de la comunidad autónoma con naturaleza de impuesto indirecto que tiene la finalidad de "minimizar o corregir" la afección al medioambiente que produce el consumo del agua. Debía ser gestionado por la Agencia del Agua y ponía en el foco el consumo de agua por los usuarios y la contaminación generada.
El impacto negativo que generó el nuevo tributo entre la población fue transmitido desde sectores municipales al gobierno, que se inclinó definitivamente por suspender su aplicación antes de que entrara en funcionamiento.
Sin embargo, ahora Ciudadanos da un paso más y pretende que el impuesto desaparezca definitivamente para evitar que sea rescatado y aplicado más adelante: “Es injustificable e injusto para nuestra comunidad autónoma que está en el vagón de cola de España”, ha dicho Carmen Picazo quien ha añadido que “en una comunidad con la mayor tasa de inflación de España, los ciudadanos han de recuperar su capacidad de compra y de ahorro y esto pasa por la eliminación de impuestos injustos como el impuesto al agua, pero a ello hay que sumarle la eliminación del impuesto de sucesiones y de transmisiones entre familiares por inmorales”.