De este modo, en la primera de las mesas redondas, la presidenta de la Diputación de Toledo participó mostrando las líneas maestras del Gobierno que dirige en materia de despoblación “uno de los retos a combatir en la presente legislatura”, y donde estuvo acompañada de María de los Ángeles Armisén y Santiago Cabañero, presidentes de la Diputación de Palencia y Albacete respectivamente.
Un coloquio dirigido por Manuel Campo Vidal y en el que Cedillo mostró la importancia de las diputaciones para combatir la despoblación y generar esperanza en la España vaciada. Así mismo, “tenemos que instalar en nuestros pueblos el modelo de progreso del siglo xxi, sin renunciar a la calidad de vida que ofrece el mundo rural”, aseguró Cedillo, siendo necesaria la cooperación con el conjunto de administraciones para dotar de los mejores servicios y oportunidades al mundo rural para generar oportunidades y prestar los mejores servicios.
En cuanto a las medidas a desarrollar, la presidenta de la Diputación de Toledo aseguró que “hay que mejorar las infraestructuras, el empleo, el acceso a las nuevas tecnologías, la movilidad, los servicios esenciales y todo lo relativo al bienestar, la calidad de vida y el progreso de nuestros pueblos”.
Del mismo modo, aseguró que no se puede permitir que “se instale en la sociedad el olvido de la España rural”, ya que representa el 90% del territorio de nuestro país, y supone un enclave “fundamental para el desarrollo económico de la nación”.
Cedillo asumió “la obligación de reivindicar lo rural como fuente de progreso, desarrollo y bienestar”, incidiendo en que se trata de un camino que desde que asumió el cargo se ha empezado a recorrer.
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