Así lo ha desvelado este lunes en declaraciones a los medios la consejera del ramo, Patricia Franco, que ha explicado que, en concreto, la ocupación en los alojamientos rurales está por encima del 73% mientras que en el caso de los hoteles está en el 71%, aunque provincias como la de Albacete, en la que el turismo rural "tiene mucha fuerza", se encuentran ya con una media estimada del 85% de ocupación.
Mientras, en el caso de los alojamientos hoteleros, las dos ciudades Patrimonio de la Humanidad de la región, Toledo y Cuenca, son las que tienen una mejor posición, con un comportamiento previsto del 78%.
En su conjunto, Franco ha calificado estos números de "buenas cifras" en un puente "donde la climatología no acompaña" pero en el que la gente "también aprovecha para hacer alguna escapada rural" o acudir a alguno de los establecimientos hoteleros castellanomanchegos.
La responsable regional de Economía, Empresas y Empleo ha ligado estos datos con los del comportamiento del turismo rural en la región a lo largo del año, con Castilla-La Mancha siendo la comunidad autónoma que más aumenta sus datos en viajeros en turismo rural y la segunda con mayor crecimiento en pernoctaciones.
"Nuestro turismo rural tira, tira con fuerza y eso está afectando también al mercado de trabajo", ha expuesto, señalando que la región está "en las mayores cifras de empleabilidad en el sector del turismo y la hostelería de toda la historia".
Por todo ello, Patricia Franco ha considerado que estos datos son "unos buenos aperitivos" de cara a una campaña navideña que espera que sea "buena" en la Comunidad Autónoma.