Para SATSE esta situación es inadmisible puesto que ya el miércoles eran 65 los pacientes pendientes de ingreso. Una situación que, lejos de ser aislada, se viene repitiendo en las últimas semanas, con decenas de pacientes a la espera de poder ingresar. En los pasillos de Urgencias se acumulan las camillas, mientras los boxes están doblados (dos pacientes por box) y la zona de los sillones de observación, colapsada.
Desde la Gerencia del Hospital se ha optado desde el jueves por la apertura de una veintena de camas. Una medida que para SATSE no soluciona el problema dado que aún quedan 80 camas cerradas y su habilitación conlleva tiempo (contratación de personal, limpieza de la planta…) y mientras tanto en el servicio de Urgencias se mantiene la presión asistencial.
SATSE señala que esta grave situación impacta tanto en aquellos pacientes que deben esperar más de 24 horas en un sillón a que se lleve a cabo su ingreso, como en los que acceden al servicio de urgencias requiriendo una intervención rápida, ya que los boxes de atención están ocupados lo que merma la capacidad de reacción e inmediatez, clave en este servicio.
Para SATSE es inaudito que Toledo disponga de un hospital que, aun contando con la dotación suficiente de recursos para atender a la población, tenga cerradas casi un centenar de camas. “No podemos entender que los recursos con los que cuenta el hospital estén inhabilitados debido a los recortes en la contratación de profesionales que llevamos padeciendo durante todo el mes de octubre y que están ocasionando este grave problema en Urgencias”, como apunta la secretaria provincial de SATSE Toledo, Gemma Torrejón.
Por ello, desde SATSE se ha reclamado a la gerencia del Complejo Hospitalario de Toledo la apertura inmediata de todos los recursos asistenciales, y que en estos momentos se encuentran cerrados por falta de personal, con el fin de poder dar respuesta a las necesidades asistenciales que tiene la ciudad y su comarca.
Además, desde SATSE se exige que se garantice el número de presencias de enfermeras en todas las unidades para proporcionar seguridad y calidad en la asistencia que se presta a los pacientes, asegurando a su vez a los profesionales unas condiciones dignas y seguras en su puesto de trabajo.
Fuentes de la plantilla de enfermería del servicio de Urgencias del Hospital de Toledo han señalado a clm21.es que "la situación es insostenible": mala para los pacientes y la calidad de su asistencia y, asimismo, nefasta para las condiciones en las que deben desarroolar su trabajo". En este sentido, denuncian que diariamente se encuentran sometidos a una gran presión y, lo más importante, recalcan la gravedad de lasituación aún cuando todavía no ha comenzado el pico epidemiológico (Covid, gripe, bronquitis, etc.) que se espera para dentro de unas semanas y que añadirá si cabe mayor presión al servicio de Urgencias.
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