FEAPS (Federación Española de Asociaciones Pro Subnormales) fue la denominación original de la organización, utilizada durante muchos años hasta que se decidió un cambio que respondiera a un lenguaje más inclusivo y moderno.
Con motivo de esta conmemoración, y gracias a la colaboración del Ayuntamiento de Toledo, algunos de los monumentos más emblemáticos de la ciudad se iluminarán de color verde, el color de la organización. Los espacios que se teñirán de luz verde serán la Puerta de Alcántara, el Puente de Alcántara, el Monasterio de San Juan de los Reyes y el Baño de la Cava.
El Día de la Plena inclusión nació en 2015 para visibilizar y reivindicar la plena ciudadanía de las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo, promoviendo su participación en la sociedad y recordando la importancia de construir un entorno más justo, solidario e inclusivo.
“El 2 de octubre queremos recordar que trabajamos por una sociedad en la que todas las personas, sin excepción, puedan ejercer sus derechos y formar parte de la vida comunitaria en igualdad de condiciones”, destacan desde Plena inclusión Castilla-La Mancha.
Con este gesto simbólico, la capital regional se suma a una causa que, tras una década de recorrido bajo el nombre de Plena inclusión, sigue avanzando para derribar barreras, fomentar la participación y fortalecer el reconocimiento social de las personas con discapacidad intelectual y sus familias.
En Castilla-La Mancha, la organización agrupa a más de 60 entidades, representando a 8.500 personas con discapacidad intelectual o del desarrollo, además de contar con 2.700 profesionales, 1.000 voluntarios y 240 centros. Su misión es trabajar por la plena inclusión de las personas con discapacidad y sus familias, promoviendo su calidad de vida y defendiendo sus derechos.