El holding aeronautico ha completado casi en su totalidad la recompra de acciones por valor de 1.000 millones de euros anunciada en febrero de 2025 y ha asegurado que tiene la intención de anunciar nuevas distribuciones a sus accionistas en la presentación de los resultados del ejercicio completo de 2025 en febrero.
La compañía asegura que está encaminada a conseguir "otro año de fuerte crecimiento de beneficios y márgenes en 2025".
Según ha informado este viernes la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, el beneficio de explotación se elevó un 18,3% hasta los 3.931 millones de euros.
Los ingresos totales del holding se elevaron a 25.234 millones de euros, un 4,9% más, con una deuda financiera situada en 14.783 euros.
"Seguimos centrados en la creación de valor a largo plazo para nuestros accionistas, contribuyendo a alcanzar nuestros objetivos financieros mediante una inversión disciplinada de cara al futuro para mejorar la experiencia del cliente y la eficiencia operativa", aseguró el consejero delegado de IAG Luis Gallego.
En la presentación de resultados la compañía asegura que están encaminados a conseguir otro año de crecimiento de ingresos y beneficios, progreso de márgenes y fuertes retornos para sus accionistas.
"Estamos llevando a cabo nuestra estrategia y seguimos construyendo un negocio que ofrecerá creación de valor sostenible a lo largo del ciclo", asegura.
International Airlines Group (IAG), holding de Iberia, British Airways y Vueling, inauguró la sesión bursátil este viernes con una fuerte caída del 6,5% hasta los 4,4 euros por acción, en una reacción del mercado que contrasta con los resultados del tercer trimestre de 2025, que muestran un crecimiento del beneficio de explotación del 18,3% en los nueve primeros meses del año hasta los 3.931 millones de euros.
Las acciones del holding ya habían cerrado la sesión del jueves con una caída del 2,61%, cotizando a 4,707 euros por título tras restar 0,126 euros respecto al cierre previo ante la volatilidad en el sector aéreo por presiones en los costes de combustible y la demanda transatlántica.
Los inversores parecen castigar al grupo por la debilidad en ingresos unitarios de pasajeros que disminuyeron un 2,4% y un entorno macroeconómico incierto, pese a la solidez operativa y el avance en capacidad.