Mira con preocupación el nuevo deterioro de la situación económica, diez años después de la crisis que se originó bajo el mandato de Zapatero en España y de José María Barreda en Castilla-La Mancha, que se tradujo en destrucción de empresas y empleos (“más de 125.000 en Castilla-La Mancha en la última etapa socialista”), deuda, impago a proveedores (“Nos encontramos facturas en los cajones por más de 4.000 millones de euros”) y un panorama de destrucción del tejido productivo y de los servicios sociales. Se siente preocupada por la deriva independentista y por la respuesta que se ha dado desde el PSOE y especialmente por Pedro Sánchez y por García-Page: “La unidad de España no se defiende con palabras solamente. Se defiende con hechos y Emiliano García-Page gobierna y ha estado gobernando en este tiempo con los que han puesto y siguen poniendo en peligro la unidad de España”.
Y mira al mañana, a las elecciones de abril y mayo. Y lo hace en clave económica y en clave ciudadana: “Nos jugamos el futuro”. Y pide un cambio, lo ve necesario: “Es fundamental. Hay personas que lo están propiciando. Tenemos un candidato a la Presidencia, Paco Núñez, que es una persona que a lo largo del tiempo ha demostrado que sabe gestionar, que sabe gobernar, que sabe estar con los problemas de la gente, que sabe recibir las inquietudes de los ciudadanos y trasladar esas preocupaciones a una forma de gobernar para los ciudadanos y por los ciudadanos.
- CLM 21 ¿Cuál ha sido el impacto de estos últimos cuatro años en la Comunidad Autónoma?
Ana Guarinos: Han sido cuatro años perdidos en Castilla-La Mancha. En 2015, se partía de una situación económica que no tenía nada que ver con la que había en el año 2011. Cuando hace cuatro años llegó el gobierno socialista no se encontró 4.000 millones de euros en facturas sin pagar. Esa deuda comercial generada por el gobierno socialista la tuvimos que pagar desde el gobierno del PP. Además en esta legislatura han tenido 1.000 millones de euros más en el presupuesto. Y con todo y con eso el gobierno no ha sabido aprovechar las oportunidades. No ha sabido aprovechar ese incremento del presupuesto para invertirlo en servicios sociales, para impulsar la recuperación económica y el empleo, que ha venido impulsado por una inercia a nivel nacional. Han sido cuatro años totalmente desafortunados para el gobierno, con las consecuencias que eso ha tenido para Castilla-La Mancha. Se podían haber aprovechado muy bien estos cuatro años y se ha pasado de largo
- CLM 21 ¿Qué se juega Castilla-La Mancha el 28 de Abril y el 26 de Mayo?
A.G. Se juega sobre todo su futuro. Los ciudadanos queremos tener una mejor calidad de vida de la que tenemos. Se juega todo, desde el punto de vista social se juega el tener unos servicios sanitarios, unos servicios sociales, y un empleo magníficos. Estamos en el corazón de España y no estamos aprovechando nuestra situación estratégica. En este momento, la tasa de paro es dos puntos superior a la media nacional. Tenemos que aprovechar la ventaja económica que nos da estar donde estamos. No podemos estar a la inercia del gobierno que es la de estar parado, viendo cómo pasa el tiempo dejando todo para el futuro y para la próxima legislatura. Ha estado cuatro años cruzado de brazos viendo como pasaban los días.
- CLM21 ¿Ve en Castilla-La mancha una solución a la andaluza?
A.G. Veo lo que los ciudadanos quieran que pase. En Andalucía decidieron dar un cambio después de una hegemonía del Partido Socialista a lo largo de toda la democracia. Era la única comunidad autónoma en la que no había gobernado el Partido Popular, ni había existido una alternativa diferente al Partido Socialista, pero los ciudadanos decidieron que tenía que haber un cambio. Las urnas decidieron que ese cambio fuera una alternativa de centroderecha, con tres formaciones políticas, Partido Popular, Ciudadanos y Vox.
¿Esa alternativa se puede producir en Castilla-La Mancha? Estoy convencida de que es una de las posibilidades. Los ciudadanos están pidiendo cambio también en Castilla-La Mancha y pueden decidir que esa sea la opción tras las elecciones del 26M. Puede ser una opción en Castilla-La Mancha porque los ciudadanos están cansados de lo que han visto en la región. Hemos vivido un pasado que hay que recordarlo y lo hago con pena. En el año 2011, el PSOE dejó a Castilla-La Mancha como la segunda región más endeudada de España y la primera en déficit. En aquel momento estábamos en cerca del 7% del PIB, que podría haber llegado al 12% en diciembre de ese año si no se hubiera puesto freno. Vivíamos en una Comunidad Autónoma en la que solamente había deudas y facturas por pagar, en la que las empresas dejaban las obras sin terminar porque el gobierno, entonces socialista, les debía certificaciones de obras y miles de millones de euros y vivíamos en una región en la que el desempleo se incrementaba permanentemente con unas cifras que jamás nos hubiera gustado vivir. Se pusieron en peligro los servicios sociales, el empleo, el futuro de Castilla-La Mancha. Quiero recordar que con José María Barreda en esta región en la última etapa del gobierno socialista de 2007 a 2011 se destruyeron 125.000 empleos. Luego tocó hacer sacrificios a los ciudadanos. Y está claro que no quieren volver a esa situación, no quieren volver a ese pasado que recuerdan con tristeza y quieren un futuro mejor que no quieren que la herencia que vayan a recibir sea la que dejó el Partido Socialista en su momento.
- CLM21 Habla de la nueva herencia ¿En qué cree usted que ha perjudicado más este gobierno a la Comunidad Autónoma?
A.G. Al gobierno le ha sobrado mucha prepotencia y le ha faltado credibilidad. El gobierno de Emiliano García-Page y de sus socios de Podemos llegó en 2015 prometiendo muchas cosas y generando muchas expectativas y muchas ilusiones en los ciudadanos de esta región. A lo largo de estos cuatro años hemos visto que de todo aquello que se prometió prácticamente nada se ha cumplido. Tenemos un gobierno que se ha dedicado a realizar anuncios a lo largo de estos cuatro años, que no ha cumplido los compromisos, lo que prometió y aquello que dijo que iba a hacer y que finalmente no hizo y que, por lo tanto, todo lo fía al siguiente mandado, a la siguiente legislatura. Esta es una de las grandes, yo diría la mayor decepción. Los ciudadanos están desencantados con Emiliano García-Page porque les ha mentido, porque les ha engañado y porque es un gobierno que ha perdido la credibilidad.
Me refiero por ejemplo al tema del empleo. A pesar de todos los que se prometieron y que, por cierto, ahora se siguen prometiendo, la tasa de desempleo en Castilla-La Mancha es dos puntos superior a la media nacional. El paro en España ha bajado menos a lo largo del último año, cerca de un 12,3% menos que en 2017. Hay una ralentización de la economía.
Tenemos en sanidad problemas con las listas de espera. La realidad es muy distinta a la que prometió Emiliano García-Page. Tenemos un gobierno que ha falseado las listas de espera. Ocultan la verdadera realidad de los pacientes, que no son números, son personas que hay detrás de las listas de espera. En estos momentos son 11.257 más esperando en los tramos más largos, bien para una consulta, una prueba diagnóstica o una operación. Tenemos problemas con el convenio sanitario con la Comunidad de Madrid, que Emiliano García-Page ratificó y que, sin embargo no ha cumplido ni le dado el valor que realmente tiene, obligándonos a muchos ciudadanos, sobre todo de Toledo y de Guadalajara a desplazarnos cientos de kilómetros para ser atendidos. Tenemos unos hospitales que no ha sido capaz de terminar. Todo esto por parte de una persona que exigía que se terminaran con carácter inmediato. Tenemos problemas con la atención primaria desde la reducción de los horarios de atención de médico y de enfermería en los municipios sobre todo en los más pequeñitos, incluso hasta el cierre de farmacias en el mundo rural, como la que se ha producido en Villanueva de Alcorón.
Tenemos un gobierno que ha hecho gala de una transparencia que luego no ha sido capaz de cumplir. Quiero recordar Emiliano García-Page prometió que todos los miembros del gobierno iban a comparecer antes de su toma de posesión en las Cortes de Castilla-La Mancha, y él no ha comparecido todavía después de cuatro años.
Es un gobierno que no ha legislado. Prácticamente no se han entregado en las Cortes iniciativas legislativas. La iniciativa de todo tipo, legislativa y de control, que se ha llevado en esta Cámara la ha llevado el PP. Si no hubiera sido por eso, prácticamente no habría habidos plenos o hubieran sido muy cortos.
Tengo que recordar el fracaso con los agricultores y ganaderos, a los que a algunos todavía les deben la PAC desde el año 2015. Tengo que recordar el recorte a las ayudas ecológicas a lo largo de este mandato. Tengo que recordar la cantidad de fondos europeos que se han perdido por la mala gestión del gobierno de Emiliano García-Page.
Tengo que recordar que lo que los funcionarios públicos han vivido en este mandato han sido promesas realizadas y no cumplidas…Tantos miles de puestos de trabajo que se iban a crear y finalmente no se han creado. Y la mejora de los empleados públicos, que ha venido provocada fundamentalmente por las decisiones que se han tomado a nivel estatal y por un acuerdo marco que se firmó en marzo de 2018 entre el gobierno de España, entonces del PP y las principales fuerzas sindicales.
Tengo que recordar la cantidad de expedientes de dependientes que se iban a sacar del cajón durante el primer año de legislatura y que todavía están esperando. Muchos dependientes han fallecido esperando recibir una prestación, razón por la cual, Emiliano García-Page ha recibido por dos años consecutivos ese premio que le ha concedido la Plataforma para la Dependencia de “gente sin alma”.
En educación se han cerrado escuelas rurales. Emiliano García-Page no ha abierto las escuelas rurales que dijo que iba a abrir, ni siquiera ha mantenido abiertas algunas de las que se abrieron, quiero recordar que ha cerrado cinco escuelas rurales en este mandato sólo en la provincia de Guadalajara y hasta tres colegios públicos, algo que no había sucedido nunca en Castilla-La Mancha.
También, más deuda, más déficit. La recesión en Castilla-La Mancha que ya la estamos experimentando y más ralentización en el empleo.
Además es un presidente que no ha tenido palabra a la hora de saber defender a esta Comunidad Autónoma y a la hora de defender a este país. Emiliano García-Page no ha sido capaz de defender a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en una propuesta que el Grupo Popular llevó a las Cortes de Castilla-la Mancha. Se alió de nuevo con sus socios de Podemos. No ha sido capaz de votar a favor de que no se indultara o en contra de los indultos a todas aquellas personas que hoy están en la cárcel y que están siendo juzgadas en estos momentos por posibles delitos de rebelión o/y sedición. Emiliano García-Page no ha tenido ningún inconveniente en aliarse con los que defienden la independencia y con quienes se han ido a negociar y a hablar de una situación ilegal e inconstitucional en Cataluña, como son sus socios de Podemos. No ha tenido ningún reparo en incluirnos en el gobierno y en poner en peligro también la unidad de España con ese pacto único en este país, que es el pacto entre el PSOE y Podemos.
Ha habido muchas dudas también a la hora de defender la Constitución Española de 1978, aunque luego le guste ponerse banderas de España en la muñeca. Muchas de las cosas que está haciendo el Partido Socialista son cuestionables. Aunque luego Emiliano García-Page intente también confrontar con Pedro Sánchez, hay que tener en cuenta que son lo mismo, que es la persona que se ha puesto del lado de Pedro Sánchez, a defender a Pedro Sánchez y que es la que más ha hecho en estos momentos por perjudicar los intereses de España y de todos los españoles. La unidad de España no se defiende con palabras solamente. Se defiende con hechos y Emiliano García-Page gobierna y ha estado gobernando en este tiempo con los que han puesto y siguen poniendo en peligro la unidad de España.
Ese es el gobierno que tenemos en CLM, un gobierno que tampoco ha sabido defender al mundo rural, porque no ha habido inversiones, no ha habido iniciativas y no han sabido defender cuestiones como la caza o la pesca. Aprobaron una ley anticaza con aquellos que están en contra de un sector que es fundamental en nuestra región
Ese es el balance de Emiliano García-Page, una persona que no cumple prácticamente nada de lo que promete. Pasará a la historia como el hombre que más anuncios ha realizado y que menos promesas ha cumplido .
- CLM21. Ante esta situación y después de ese panorama de cuatro años que acaba de plantear, ¿qué es lo que tendría que hacer el nuevo gobierno tras las elecciones autonómicas?
A.G. En primer lugar generar las condiciones para que la economía castellano-manchega vaya a más, para que se pueda crear más empleo en esta región, para que todo el mundo tenga la misma igualdad de oportunidades independientemente de si viven en una ciudad o en el mundo rural y para que también no sintamos que tenemos agravios respecto a otras regiones de España.
Es fundamental un cambio. Hay personas que están propiciando ese cambio. Tenemos un candidato a la Presidencia, Paco Núñez, que es una persona que ha demostrado a lo largo del tiempo que sabe gestionar, que sabe gobernar, que sabe estar con los problemas de la gente, que sabe recibir las inquietudes de los ciudadanos y trasladar esas preocupaciones a una forma de gobernar para los ciudadanos y por los ciudadanos. Tenemos un candidato que percibe esa sensibilidad. Estoy convencida de que va a ser el futuro presidente de Castilla-la mancha. Porque la gente ve en él una cercanía y una proximidad que no tiene actualmente en el resto de candidatos a la Junta de Comunidades, incluido el máximo responsable del Partido Socialista, Emiliano García-Page.
Lo que hay que hacer es desarrollar una política fiscal que atraiga la implantación de empresas en Castilla-La Mancha. No es posible que la única medida que haya tomado Emiliano García-Page desde el punto de vista económico y fiscal haya sido la subida de impuestos a empresas y a ciudadanos. Hay que pensar en una política fiscal encaminada a la reducción de impuestos, como los de actos jurídicos documentados, de transmisiones patrimoniales, sucesiones y donaciones, incluso el impuesto sobre el patrimonio.
Hay que pensar en una política de prestación de servicios de cara al ciudadano, que les acerque los servicios y que no los disperse.
No es posible que tengamos que vivir en una situación de incertidumbre permanente. Hay que garantizar a las personas que viven en el mundo rural que tienen que tener unos buenos servicios, unas buenas comunicaciones, unas buenas infraestructuras por carretera y digitales.
Necesitamos saber que tenemos la misma igualdad de oportunidades, es decir, que no tienen más derechos unos ciudadanos por vivir en una comunidad autónoma diferente de los que tenemos los que vivimos en Castilla-La Mancha. Necesitamos alguien que piense en la Comunidad, en mejorar las condiciones y la calidad de vida de los ciudadanos de esta región, que piense en el futuro, en el empleo, que piense que aquí se puedan venir a instalar empresas, que son las que generan riqueza, que piense que en esta región tenemos derechos a unos servicios sociales de calidad, dignos y mejores que los actuales.
El ciudadano sabe que es posible tener una alternativa de un gobierno que no les mienta y les engañe, como está haciendo el actual y que sea creíble. No necesitan un gobierno que permanentemente se dedique a realizar anuncios. Necesitan un gobierno que haga realidad los compromisos que asume con la sociedad. Ese es el gobierno que necesitamos en Castilla-La Mancha y ese es el gobierno del cambio que estoy absolutamente convencida que se va a producir el 26 de mayo.
- CLM21 La bajada de impuestos es un debate recurrente, que se produce en casi todas las campañas electorales. ¿Hay margen? ¿Tienen novedades para esa modificación fiscal?
A.G. Siempre hay margen para la bajada de impuestos siempre que se generen condiciones económicas que sean las que verdaderamente lo hagan posible. En Castilla-La Mancha hemos demostrado cuando hemos gobernado, y lo hemos hecho en las peores condiciones económicas, que en esta región se podía llegar a un IRPF que en el tramo más bajo, era el más bajo de toda España. Cuando Castilla-La Mancha ha tenido las peores condiciones de ingresos y también de déficit, el Partido Popular ha demostrado que se puede gobernar bajando impuestos y que esa bajada es favorable a la economía. Podemos decir que cuando hemos gobernado en España hemos propiciado una política de bajada de impuestos que ha generado que las empresas creen puestos de trabajo, que se instalen y que todo eso al final redunde en más ingresos para las arcas públicas. Cuantas más empresas haya, mejor porque más cotizarán por los trabajadores, pagarán también determinados tipos de impuesto, los trabajadores podrán consumir más. Se puede invertir más y todo eso redunda en mayores ingresos.
Sí, existe margen para una mayor recuperación económica, existe margen para una política fiscal adecuada para la mayor creación de empleo porque todo eso redunda indirectamente de nuevo en la sociedad y en mayores ingresos para las administraciones públicas. Por lo tanto, sí siempre y cuando se tomen las medidas adecuadas. Estamos viendo cómo una política nacional actual, de mayor presión fiscal no es beneficiosa para las empresas y tampoco para el empleo.
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