Merino pide la unidad de todos los grupos parlamentarios en la defensa del sector agrario ante la imposición de aranceles estadounidenses

Así se ha pronunciado Merino, en el Pleno de las Cortes Regionales, donde ha tendido la mano al PSOE y a Ciudadanos en busca de soluciones conjuntas que contrarresten los efectos de los aranceles de EEUU en los agricultores y ganaderos de castilla-La Mancha.

De esta manera, ha explicado que el pago de estos aranceles del 25 por ciento afectará principalmente a nuestra región, ya que somos la mayor superficie de viñedo del mundo, la segunda región española productora de aceite de oliva y donde el queso manchego sería el producto más afectado.

Merino ha señalado que la propuesta de resolución presentada por el GPP está abierta al diálogo y a la negociación, puesto que el interés del PP es la búsqueda de una solución que sea buena para los agricultores de nuestra región.

En este sentido, ha destacado la importancia de apoyar al sector agrario para que no se sientan solos ante este varapalo, y que vean en las instituciones una herramienta útil en defensa del campo.

La portavoz del GPP ha dejado claro que hoy más que nunca hay que dar ejemplo y demostrar a la sociedad castellano-manchega que por encima de los partidos están nuestros agricultores y la defensa de los intereses de Castilla-La Mancha.

Cientos de empresas de CLM se verán afectadas por los aranceles

Merino ha detallado que según la FENIL –Federación Nacional de Industrias Lácteas-, las exportaciones de queso a EEUU desde España se han incrementado en un 50% en los últimos 5 años y el valor de las 11.500 toneladas de queso exportadas en 2018 suponen 88 millones de euros, de los que 51 millones corresponden a Castilla La Mancha.

Por ello, ha recordado que estos índices de crecimiento dan idea de las expectativas que estos mercados suponían para el queso manchego, como para el resto de producciones afectadas.

Merino ha lamentado que se verán afectadas cientos de empresas castellano-manchegas de transformación, elaboración, envasado y distribución, y que los propios productores, agricultores y ganaderos serán los que paguen las consecuencias y serán los más afectados.

La portavoz popular ha señalado que los responsables comerciales de la UE y de EEUU se reunirán el próximo 14 de octubre en Ginebra para intentar negociar y llegar a un acuerdo, pero, ha advertido, que si no hay acuerdo, EEUU no dará marcha atrás y los aranceles comenzarán a aplicarse el próximo 18 de octubre.

Por eso, ha insistido en que todas las gestiones que se realicen antes del 18 de octubre son vitales para reconducir esta situación, ya que Castilla-La Mancha es una de las regiones más afectadas por este conflicto comercial, no solo en términos absolutos o relativos en un año concreto, sino por la tendencia creciente de nuestras exportaciones a EEUU y su proyección de futuro que pueden verse gravadas con estos aranceles del 25 %.

Y por ello, condicionará tanto el volumen de exportaciones actuales, como las posibilidades de crecimiento de las mismas; en concreto, de los cerca de 1.000 millones de euros que debe recaudar España, si esto no se arregla antes, se cobrarán en aranceles de un 25%

La agricultura y la ganadería, principal motor de desarrollo económico en CLM

Merino ha destacado que hablar de economía en Castilla-La Mancha es hablar obligatoriamente de agricultura y ganadería; del vino, de aceite de oliva o del queso manchego, así como hablar de las mujeres y los hombres del campo que ponen en marcha el motor económico de esta región, frenan la despoblación y mantienen el medioambiente.

"Y, -ha continuado-, gracias a nuestros agricultores y ganaderos tenemos una potente industria agroalimentaria, con cooperativas y empresas encargadas de la comercialización, la distribución o el envasado de las producciones agrarias". "Además, gracias al sector agrario fijamos la población en nuestros municipios y tenemos a los mejores guardianes del medioambiente y los recursos naturales".

De esta manera, se ha referido a los agricultores de nuestra región que hoy se manifiestan en Madrid para reclamar dignidad por su profesión, unos precios justos, transparencia en los mercados, mayor protección a la producción y más mano dura en los fraudes.