Crece el pesimismo y la confianza empresarial cae a niveles de hace tres años y medio
lunes 09 de marzo de 2020, 20:49h
Los empresarios castellano-manchegos y del resto del país creen que la situación económica va peor y que las expectativas son a empeorar. Las opiniones de los gestores de negocios fueron recogidas por el Instituto Nacional de Estadística en días previos a que se produjeran los primeros casos de coronavirus en España y, por tanto, todavía no reflejan de forma clara el impacto de la enfermedad en el ánimo empresarial. La última validación de los metadatos con los que ha trabajado el INE es del 26 de febrero. En esa fecha, los datos que dejaba el COVID-19 eran: 81.005 personas infectadas y 2.762 fallecidos en el mundo, 322 contagios en Italia y 9 en España. En los días previos, cuando se hizo la toma de opiniones, el empresariado castellano-manchego y de otras muchas zonas de España ya mostraba un fuerte grado de pesimismo en el futuro, aunque ese ánimo no era compartido en algunas regiones (Aragón, Extremadura, Canarias, Madrid y País Vasco) que se mostraban optimistas.
La confianza empresarial en Castilla-La Mancha cae un 2% en el primer trimestre del año respecto al trimestre anterior. A nivel nacional el descenso es del 0,4%. Con ese descenso, Índice de Confianza Empresarial Armonizado (ICEA) del primer trimestre del año se va a los niveles más bajos desde hace tres años y medio. El ICEA es elaborado por el Instituto Nacional de Estadística a partir de las opiniones de los gestores de negocios sobre la situación registrada en el trimestre que acaba y las expectativas para el trimestre entrante.
Las expectativas empresariales habían caído en el último trimestre de 2019 tanto en nuestra Comunidad como en el conjunto del país por la desaceleración que registraba la economía. Ese mayor pesimismo ha ido en aumento en el primer trimestre de 2020 y queda reflejado fundamentalmente en uno de los dos componentes con los que se elabora el ICEA, el de las expectativas en el trimestre entrante, que se anota la mayor caída de los últimos cuatro años y que en Castilla-La Mancha se mueve en un -11,2% (en España en el -5,9%).
Pero no sólo las expectativas se mueven en terreno negativo. Entre el empresariado castellano-manchego predomina la opinión negativa sobre el trimestre que ha cerrado (el otro componente a partir del cual se construye el ICEA). En concreto, el saldo es del -4% mientras que a nivel nacional es del 1,9% positivo.
¿Cómo se hace el cálculo? Las opiniones de los empresarios se agrupan en tres bloques: optimistas o favorables, normales y pesimistas o desfavorables. El resultado se produce por la diferencia entre las favorables y las desfavorables. El signo negativo marca el pesimismo, el positivo, el optimismo. Ese método se aplica tanto a las opiniones sobre la situación como las referidas a las expectativas. Luego se hace una media geométrica que es la que determina el Índice de Confianza Empresarial Armonizado.
Por sectores, los datos nacionales sitúan el mayor pesimismo en el comercio. En cuanto a las expectativas todos se mueven en negativo. El comercio es del -14,5%. Le sigue la hostelería y el transporte (-10,3%), la construcción (-4,9%), la industria (-4,2%) y otros servicios (-0,6%).
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