En este sentido, el Ejecutivo autonómico ha dado respuesta durante el año 2019 a 11 proyectos con una media de 30.000 euros por proyecto, para la asistencia de Emergencia a población desplazada en el Norte de Nigeria, para mitigar la crisis alimentaria en Mauritania, para reducir la vulnerabilidad en la salud de la población sur-sudanesa en Uganda o para paliar la desnutrición y la hambruna en la población saharaui, entre otros.
De esta forma, según ha indicado la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, “el Gobierno de Castilla-La Mancha pone de manifiesto su compromiso con las políticas de Cooperación Internacional y su convicción y obligación de aliviar el sufrimiento humano, así como la solidaridad y altruismo de la sociedad castellano-manchega frente a las necesidades y las realidades de aquellos que peor lo están pasando y que son más vulnerables”.
Se entiende por ayudas de emergencia, dada la necesidad de una acción inmediata, el conjunto de acciones de ayuda proporcionada con un carácter de urgencia y no discriminado a los afectados por un desastre, epidemias y pandemias, con el fin de aliviar sus condiciones de vida, a través de la provisión de los bienes y servicios básicos.
La subvención máxima a conceder podrá ser del 100% del coste total del proyecto y el importe máximo individualizado por cada proyecto subvencionado no excederá de 30.000 euros.
Las solicitudes podrán presentarse, hasta el próximo 31 de octubre, mediante el envío telemático de los datos a través del formulario incluido en la sede electrónica de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, en la dirección http://www.jccm.es.
También se pueden solicitar en el registro de los servicios centrales de la Consejería de Bienestar Social o en el de sus direcciones provinciales, así como en cualquiera de los lugares previstos en la Ley de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común.