La curva ascendente de la pandemia vuelve a demorar en agosto la asistencia a pacientes con otras patologías
- Los hospitales de Ciudad Real y Alcázar, los más afectados por el aumento de las listas de espera
lunes 21 de septiembre de 2020, 21:15h
En agosto, las cifras están todavía lejos de los duros días de finales de marzo y primeros de abril, pero los hospitales de Castilla-La Mancha ya notan la progresión y, en esta ocasión y, con la lección aprendida, se activa el plan de contingencia. La prioridad es la Covid. La lucha contra la pandemia ya ha roto la primera línea de defensa sanitaria, la atención primaria. En algunos grupos de la población existe una falsa sensación de seguridad y se relajan las medidas. La movilidad laboral, de compras y social hacia otros territorios hace el resto.
El 31 de julio en los hospitales de la Comunidad había 32 pacientes ingresados por Covid, 8 de ellos (uno de cada cuatro) estaban en la UCI. La progresión de casos va en aumento: Julio había terminado con 68 nuevos contagios el último día del mes. Una semana después los nuevos casos diarios llegaban a 120 y mantenían una tendencia creciente. Para el 14 ya eran 201, el día 21 ya alcanzaban los 370 y el 28 se registraban 508 nuevos casos. Agosto finaliza multiplicando por 8 los registros. Esa progresión se deja sentir también en las hospitalizaciones. A finales de mes el número de enfermos ingresados también se ha multiplicado por 8 y supera los 250, de ellos 25 están en cuidados intensivos.
La escalada pilla a las plantillas con menos personal activo a causa de las vacaciones. La prioridad vuelve a ser el Covid, que vuelve a trastocar los planes asistenciales. Ya había pasado en julio, pero ahora, con la escalada de casos empiezan a aligerarse quirófanos. Lo programado puede esperar. Si a finales de julio se había logrado reducir la lista de espera para operaciones en 902 (2,15%), en agosto la curva vuelve a tirar hacia arriba, y aumenta en 278 (0,68%) hasta los 41.373 pacientes. La subida se deja sentir sobre todo en Villarrobledo (6,97%), Manzanares (6,38%), Ciudad Real (4,97%) y Alcázar (4,45%). Hellín (-13,94%),Valdepeñas (-12,4%), Tomelloso (-11,92%) y Puertollano (-6,52%) presentan en cambio una disminución de su lista de espera quirúrgica.
En términos anuales hay 3.082 castellano-manchegos más pendientes de una llamada del hospital para ser operados. 1.362 de ellos son de Guadalajara, 969 de Ciudad Real y 791 de Alcázar, que son los tres hospitales más afectados por el incremento de listas de espera, aunque en términos porcentuales es el de Tomelloso, con un 41,38% de incremento el que más ve dispararse el número de operaciones en espera.
Por otro lado, se había empezado a recuperar el tráfico de pacientes de diversas patologías, algunos de ellos que no pudieron ser atendidos durante los meses duros, y ahora recobran fechas. No son todos, pero entre julio y agosto, la lista de espera para primera consulta por un especialista se incrementa en 11.450 pacientes hasta los 25.799, una cifra que todavía está muy por debajo de los 53.172 que había a finales de febrero, justo antes de que el estallido de la pandemia provocase el cese de buena parte de la actividad programada. En agosto, la subida se da en todos los hospitales, salvo en el de Villarrobledo. En términos porcentuales son los de Albacete y Hellín los que se anotan los mayores incrementos.
Algo parecido sucede en la lista de pruebas diagnósticas que cierra agosto con 7.087 pacientes, 928 más que en julio, de los que 428 son de Ciudad Real, 254 de Alcázar y los 219 de Cuenca. La comparativa con agosto de 2019 deja 567 pacientes más pendientes de una prueba diagnóstica (8,7%).
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