En concreto, se trata de un sistema de producción de energía renovable a través de una instalación fotovoltaica compartida entre varios usuarios, que forman parte de un grupo de consumidores que generan y comparten energía eléctrica proveniente de instalaciones de producción cercanas a sus viviendas con las que tienen un acuerdo previo.
La función de la distribuidora de Iberdrola es la de actuar como facilitador tecnológico al aportar herramientas digitales que permitan a los usuarios una participación activa en la optimización del consumo y facilitar la adecuada integración de la producción de energía renovable del autoconsumo y del despliegue de las comunidades energéticas en la red de distribución eléctrica.
Así, la compañía pone a disposición de los clientes del autoconsumo compartido la información digital que aporta la red de distribución inteligente, con datos reales y actualizados sobre la producción de generación renovable, curvas de consumo horario en tiempo real o potencias demandadas, que permitirán asegurar la máxima eficiencia de cada proyecto y ayudarán a optimizar sus costes.
SUPERA LAS 150.000 INSTALACIONES DE AUTOCONSUMO CONECTADAS.
La distribuidora de Iberdrola ha superado durante el primer semestre de 2023 las 150.000 instalaciones de autoconsumo conectadas a su red en sus áreas de actuación en España. En conjunto aportan al sistema eléctrico más de 1.200 megavatios (MW) de potencia de generación renovable totalmente integrada en la red de distribución.
Asimismo, i-DE ha publicado recientemente la Guía del Autoconsumo Colectivo para orientar al sector de instaladores eléctricos y a los promotores de este tipo de iniciativas la tramitación técnico-administrativa del despliegue de este tipo de generación energética renovable durante todo su proceso, así como para facilitar el despliegue de los autoconsumos compartidos.
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