En un comunicado, la cadena de supermercados ha apuntado que cuenta con alrededor de 90 proveedores de frutas de verano distribuidos en su mayoría por el arco mediterráneo, siendo Andalucía, la Región de Murcia, Cataluña o la Comunidad Valenciana las regiones que aglutinan el mayor volumen de compras, y Alemania, Francia y Reino Unido sus principales mercados de exportación.
Su oferta incluye distintas variedades de melones y sandías y frutas de hueso como albaricoques, paraguayos, ciruelas, cerezas, melocotones o nectarinas.
Asimismo, en su objetivo de satisfacer las necesidades de todo tipo de consumidores, en los últimos años está impulsando las compras de referencias BIO de origen español.
"En un año especialmente complicado para el campo español por el contexto económico y la sequía, en Lidl hemos vuelto a demostrar con hechos que nuestra apuesta por el producto y el productor nacionales es más fuerte que nunca", ha comentado el director general de Compras de Lidl en España, Miguel Paradela.
A su vez, se ha mostrado "orgulloso" de seguir contribuyendo a impulsar el negocio de centenares de agricultores del país, incluyendo a los proveedores de frutas de verano de la Lidl, con los que en muchos casos llevan trabajando desde hace más de 20 años.
UN MILLÓN DE TONELADAS EN CUATRO AÑOS
En los últimos cuatro años, la compañía ha adquirido cerca de un millón de toneladas de frutas de verano en España, unas cifras que la sitúan como el primer comprador de esta familia de productos.
De hecho, Lidl es desde hace años el cliente número 1 de la huerta española y su principal plataforma de exportación y, solo en 2022, realizó compras "récord" de fruta y verdura en España por valor de unos 2.700 millones de euros.
Asimismo, la compañía ya adquiere un 16% de toda la producción hortofrutícola española y concentra un 14% de toda su exportación, según un estudio de la consultora PwC.
Este mismo informe también refleja que, en la actualidad, ya son más de 55.000 los empleos indirectos e inducidos del sector agroalimentario español vinculados a la actividad de la cadena de supermercados.
PIONERO EN LA PRESERVACIÓN DE LA BIODIVERSIDAD EN EUROPA
Por otro lado, Lidl vuelve a ser pionero en su sector al desarrollar junto a Global GAP el primer estándar europeo para la preservación de la biodiversidad en el cultivo de frutas y verduras.
"Éste tiene como objetivo minimizar el impacto que a día de hoy tiene la actividad agrícola en los ecosistemas, las variedades de productos y la diversidad de especies a través de medidas que permitirán garantizar la sostenibilidad de los cultivos y aportar también valor a aquellos productos que han sido producidos bajo este criterio", han apuntado desde la compañía.
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