Según la OIVV, la producción mundial de vino, excluidos zumos y mostos, que alcanzará los 246,7 Mill. hL, con una disminución de más del 8 % con respecto a 2016, es una de las más escasas de las últimas décadas. Esta baja es consecuencia de las condiciones climáticas irregulares que afectaron a los principales países productores, especialmente en Europa.
La Organización Internacional de la Viña y el Vino anticipa una caída de la producción de un 15% para nuestro país, que se mantiene en tercera posición mundial
Nuestra Comunidad es la principal productora europea de vino. En la campaña 2016-2017, según datos del Ministerio, Castilla-La Mancha produjo 23,6 millones de hectólitros, de los 43 que se produjeron en todo el país. Según adelantó ayer la Organización Internacional de la Viña y el Vino, Jean Marie Aurand, la producción vitivinícola europea y mundial este año es especialmente baja. España es el tercer productor europeo y mundial, con 33,5 millones de hectólitros, tras Francia (36,7 millones de hectólitros) e Italia (39,3 millones de hectólitros). En los tres países se registra un descenso. La caída en España respecto a la campaña 2016-2017 es del 15%, pero la caída más acusada es para Italia, que supera el 20%. El descenso en Europa se debe a la mala climatología de este año, con heladas en primavera y tormentas de granizo.
En Europa sólo Portugal, Rumanía, Hungría y Austria han mejorado la producción respecto a 2016. La suma del vino producido en estos países se sitúa en 17,2 millones de hectólitros. Alemania, que es la cuarta productora con 8,1 millones de hectólitros también ha rebajado sus resultados.
Estados Unidos ha sido el cuarto país mundial, con 23,3 millones, seguido por Australia (13,9), Argentina (11,8), Sudáfrica (10,8) y Chile (9,5).
El año pasado, Castilla-La Mancha produjo 23,6 millones de hectólitros de los 43 millones que se transformaron en toda España
No obstante, la caída de la producción, la sectorial de ASAJA considera que los precios del vino están “claramente al alza debido a las condiciones actuales de los mercados, con fuerte demanda debido a las bajas cosechas de uva generalizadas”.
Por otro lado, la sectorial vitivinícola de ASAJA ha demandado a la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha que en las próximas convocatorias de ayudas a la reestructuración del viñero incluya a las variedades de uva autóctonas de la región en las próximas convocatorias de reestructuración. En el caso de la variedad Airén subvencionando, al menos, la transformación de vaso a espaldera y respecto a la Tempranillo o Cencibel, tanto la transformación como la reestructuración. Los miembros de la sectorial han incidido en que ambas variedades son la base principal del sector vitivinícola de la provincia, al ser las mayoritarias y las que mejor se adaptan al terreno y la climatología. Además, han destacado que siguen siendo fundamentales para la economía de numerosas explotaciones vitivinícolas.