Así se ha pronunciado hoy el Consejo de Colegios de Médicos de Castilla-La Mancha en relación a los acontecimientos producidos por la contratación de médicos generalistas adscritos al Servicio de Ginecología del Hospital Santa Bárbara de Puertollano, y la posterior denuncia ante la Fiscalía de dichos hechos por parte del Jefe de Servicio de Ginecología, en un intento de poner luz sobre las exigencias legales en la contratación de especialistas, así como las diversas funciones que pueden o no desempeñar en ausencia de un título de especialidad médica homologado.
El principal órgano colegial médico de la región señala que "de los cuatro médicos contratados, dos se encuentran colegiados en la provincia de Ciudad Real y dos en Madrid. La colegiación es obligatoria y supone la garantía para los pacientes de que los médicos colegiados cumplen con los requisitos para ejercer la profesión, por lo que la empresa contratante deber exigir el certificado de colegiación". Además, puntualiza que "para poder ejercer una determinada especialidad, es necesario estar en posesión del correspondiente título oficial, en el caso de médicos de la Unión Europea o de la homologación de esa especialidad por parte del Ministerio de Sanidad en los médicos extracomunitarios, regulado en el RD 459/2010".
A este respecto, el Consejo regional de Médicos apunta que "los médicos contratados tienen reconocido el título de Medicina, estando pendientes de la correspondiente homologación de la especialidad de Ginecología y Obstetricia, que sí tienen de sus correspondientes países". En este sentido, el comunicado recuerda que "un médico que está pendiente de homologar su título de especialista, solo puede ejercer como médico, pero nunca debe realizar funciones de una determinada especialidad sin la debida credencial o reconocimiento legal que corresponda".
El Consejo de Colegios de Médicos de Castilla-La Mancha señala también que "el proceso de contratación y selección de sanitarios es una competencia y responsabilidad exclusiva transferida, en este caso, a la Consejería de Sanidad de Castilla-La Mancha y más concretamente al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM)", de lo que se extrae que la última palabra, así como el peso de la responsabilidad sobre la contratación o no de un determinado profesional médico con una determinada formación especializada o ausencia de esta recae únicamente en el SESCAM
Por último, el Consejo asegurar que hará "un seguimiento de estas posibles contrataciones irregulares y, en el caso de que pudiera existir una presunta arbitrariedad por el SESCAM".
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