En nuestra Comunidad y según los indicadores oficiales los gastos en innovación alcanzan tan sólo el 0,66% del PIB y en I+D el 0,57%. Castilla-La Mancha ocupa el puesto undécimo entre todas las Comunidades Autónomas en gasto en I+D, sólo por delante de las islas Baleares y Canarias que tienen un modelo económico basado en el turismo, las comunidades uniprovinciales de la Rioja, Asturias y Cantabria y de los vecinos extremeños. De hecho, en relación a su PIB, las regiones que en 2016 registraron menores porcentajes de gasto en I+D fueron Illes Balears (0,33% del PIB), Canarias (0,47%) y Castilla-La Mancha (0,57%).
La investigación y el desarrollo (I+D) en CLM representó en 2016 sólo el 0,57% del PIB y la innovación tecnológica el 0,66%
En valores absolutos, el dinero que se destina a gasto en innovación y a I+D todavía está por debajo de las cifras de 2008. Ese año, antes del estallido de la crisis, y con un Producto Interior Bruto un 6% más alto que el de 2016 el gasto en innovación era el 0,88% del PIB y el de I+D era del 0,66%. Los fondos que se destinaban en 2008 equivaldrían a un 0,93% del PIB actual en innovación y a un 0,7% en I+D.
En nuestra Comunidad se declararon innovadoras durante 2016 año 548 empresas de las 15.648 que lo hacían a nivel nacional y destinaron a esa innovación tecnológica 246,5 millones de euros (13.857,5 millones a nivel nacional). En 2008, el número de sociedades de nuestra región que mantenían procesos de innovación eran 1.294 y a ello destinaban 355,5 millones de euros.
Los datos del Instituto de Estadística revelan que dentro de los objetivos perseguidos por las empresas para los procesos de innovación tecnológica primaron fundamentalmente los criterios que afectaban a los productos, seguidos por este orden por los procesos de fabricación, la mayor calidad de los bienes y servicios, la ampliación de gamas de productos y el aumento de la capacidad de producción. Los últimos objetivos estaban relacionados con el aumento de empleo, la reducción de costes en materias primas o energías por unidad producida y la reducción del impacto ambiental en los procesos.
En el apartado de Investigación y Desarrollo (I+D) las inversiones alcanzaron los 216,2 millones de euros, el 1,6% del total nacional que fue de 13.259,8 millones de euros lo que situó a Castilla-La Mancha en el puesto undécimo de entre todas las Comunidades.
Esta actividad empleaba en el equivalente a jornada completa a 3.150 personas (el 1,5% del total nacional), una cifra todavía inferior a la de 2008 cuando se alcanzaron las 3.242 personas. De los 3.150 personas vinculadas al I+D 1.703 era investigadores y de ellos 660 eran mujeres.
Por sectores, las empresas destinaron a gastos internos de I+D 129 millones de euros y emplearon a 1.538 personas, de los que 704 eran investigadores, y de entre estos 239 eran mujeres. Por su parte, las administraciones públicas destinaron a gasto interno 27 millones de euros y emplearon a 496 personas, de las que 312 eran investigadores, de ellos 132 eran mujeres.
De las empresas con procesos de I+D 53 eran fabricantes de tecnología alta y media-alta (aparatos electrónicos, informáticos, ópticos, construcción aeroespacial, fabricación de maquinaria, material eléctrico, instrumentos y suministros médicos…) y 53 prestadoras de servicios de alta tecnología, que se concentran en información y comunicación y en servicios de investigación y desarrollo.
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