www.clm21.es
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y el consejero de Sanidad en una visita al Hospital Universitario de Guadalajara.
Ampliar
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y el consejero de Sanidad en una visita al Hospital Universitario de Guadalajara. (Foto: José Ramón Márquez // JCCM)

El gobierno ha duplicado el número de pacientes que no son atendidos en los plazos de garantías sanitarias

lunes 17 de septiembre de 2018, 20:34h
El escándalo de la manipulación de los datos de la lista de espera quirúrgica ha eclipsado otros ratios que ponen al descubierto el deterioro de la atención sanitaria en Castilla-La Mancha. En lo que llevamos de legislatura el número de castellano-manchegos que superan los plazos máximos de espera de garantías sanitarias es más del doble que hace tres años (un 125,3%). En total son 27.289 los pacientes que sufren los mayores retrasos en la asistencia sanitaria.
Todo ello dando por buenas los criterios que aplica el gobierno sobre las cifras para tratar de presentar mejores resultados mes a mes. Todo lo que rodea a la “transparencia” de listas de espera está envuelto en una nebulosa.

Más dinero y menos garantías

En la legislatura el gasto sanitario lleva un crecimiento acumulado de 800 millones de euros. En la actualidad el presupuesto para el programa específico de atención integrada a la salud cuenta con 365 millones de euros más que hace tres años. Casi la mitad de ese incremento la absorbe el coste de los medicamentos y de material sanitario fungible. Desde diciembre de 2014 a diciembre de 2017, el gasto de estas partidas ha pasado de 836 millones a 959 y en el primer semestre de 2018 el coste ya era de 495 millones y anticipaba llegar a fin de año en el entorno de los 1.000 millones de euros, el 40% del total del programa de atención a la salud.

El gobierno basó su actuación en tres ejes: estabilización de las plantillas en una primera fase para un posterior incremento de las mismas, un plan de renovación de hospitales y de alta tecnología y acabar con las derivaciones sanitarias. Tres años después, las derivaciones sanitarias hacia la sanidad privada se han incrementado, el programa de renovación tecnológica lleva un fuerte retraso, al igual que las inversiones en nuevos hospitales y en mejora de los existentes. En materia de personal se han incluido en plantilla a los interinos que antes estaban contratados fuera de plantilla, se ha iniciado una oferta pública de empleo que no será efectiva en la atención hasta la próxima legislatura y se mantienen los recortes sobre las carreras profesionales de los sanitarios. En el modelo de gestión se ha apostado por las derivaciones de pacientes de unos hospitales públicos a otros, en lo que se ha dado en llamar trabajo en red.

Gastar en lo que menos dinero cuesta

Esta política es la que se deja sentir sobre las listas de espera. A pesar de que los pacientes que no aceptan la derivación a otros hospitales públicos son sacados de la lista de espera, a pesar de los cambios de criterios administrativos para adelgazar las listas y los plazos, y a pesar del uso de la sanidad privada los últimos datos, referidos al mes de agosto, ponen de manifiesto que se han agravado los problemas estructurales de la sanidad regional. El número de pacientes que esperan una operación son más que al comienzo de legislatura (14,4%). Mientras, en las otras dos listas, la de personas que esperan ser atendidos por un especialista o someterse a una prueba diagnóstica han disminuido. El problema es que el coste de la asistencia quirúrgica es el más elevado; a efectos económicos consume muchos recursos (personal, hospitalización, farmacia, prótesis, postoperatorios y seguimiento…). Y en el caso de Castilla-La Mancha además del aumento del total del número de pacientes, se ha producido una gran bola en cuanto a pacientes en tiempos máximos: 13.266 frente a los 3.938 que había al inicio de legislatura. El gobierno prioriza y dirige los fondos a las actuaciones que suponen menor coste económico para tratar de presentar unas estadísticas de mejora.

Crecen las esperas en atención por un especialista y prueba diagnósticas

Ese incremento en los tiempos de atención también se produce en las otras dos listas. En la actualidad y dando por buenos los datos del SESCAM, hay 10.085 personas que aguardan más de sesenta días para su primer consulta con el especialista. En junio de 2015, eran 5.972. El dato positivo en esta lista es la reducción en el resto de tramos de tiempo de espera, lo que deja el total en 48.038 pacientes frente a los 62.210 de hace tres años.

Similar panorama presenta la lista de pruebas diagnósticas. 3.938 castellano-manchegos llevan más de un mes pendientes de una prueba cuando hace tres años en esa situación se encontraban 2.573. La reducción del número de pacientes en los tramos cortos ha reducido la lista desde los 11.342 de junio de 2015 a los 7.955 de agosto de 2018. Las evoluciones mensuales dejan picos de reducción inusuales, cuyas causas no se pueden determinar porque el sistema no facilita la información completa.

La opacidad de la administración con los medios

Para poder conformar un acercamiento a la situación no basta con facilitar el número de pacientes que están en listas de espera, sino el de las cifras de entradas y salidas de las listas y el de actividad desarrollada.

La opacidad del gobierno dificulta conocer el grado de veracidad de las cifras oficiales y del verdadero impacto de su política sanitaria.

El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha llega a no atender a los medios de comunicación en su solicitud de información. Tanto es así que este medio ha tenido que solicitar por escrito y vía ley de transparencia el acceso a los datos sobre el estado de compras del material tecnológico previsto en el plan de modernización 2016-2021. El gobierno lejos de facilitar los datos con rapidez se acogió a la prórroga del plazo legal para facilitar la información aduciendo cuestiones de complejidad de la misma. El proceder de la administración revela la falta de confianza del ejecutivo en su propia gestión

El documento recoge que hasta la fecha se han llevado a cabo 35 actuaciones previstas en el PRAT. El Plan de Renovación de Alta tecnología Sanitaria (PRAT) 2016-2021 contempla 113 actuaciones en cinco años y una inversión de 27,85 millones de euros.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios