La otra batalla de las elecciones: La del control de los partidos a partir del día después

Cuando el sábado día 9 el Partido Socialista dio a conocer los primeros puestos de las candidaturas a las Cortes de Castilla-La Mancha, faltaba la de Ciudad Real. En esta provincia dos de sus actuales diputados, la portavoz parlamentaria, Blanca Fernández, que ha destacado por su trabajo en la tribuna y fuera de ella, y su compañero Miguel González Caballero, pasan a encabezar la lista del Congreso y abren hueco al que está por decir y por llegar al Parlamento regional. Todas las miradas se dirigen hacia el secretario provincial y actual presidente de la Diputación, José Manuel Caballero. El que fuera secretario regional de organización del PSOE entre 2008 y 2012 mantiene una estrecha relación con García-Page y buenas relaciones con las organizaciones en todas las provincias. El escenario se completa en Toledo, con el actual secretario regional de organización opta al Congreso. De las otras tres provincias, en dos de ellas, Guadalajara y Albacete, la fortaleza es para los sanchistas y en Cuenca, el actual vicepresidente encabezará la lista por esa circunscripción.

Un dato esencial es que al contrario de lo que pasa a nivel nacional, en Castilla-La Mancha para ser presidente del gobierno regional se debe ser diputado regional. Y ese dato es decisivo para el caso de que García-Page adelantara su salida del gobierno unos meses, en el caso de revalidar la Presidencia.

Los sanchistas

De fondo está desencuentro entre la dirección regional y la nacional del PSOE, entre García-Page y Pedro Sánchez. Ferraz ha aprovechado las listas nacionales como tijera de críticos de cara al futuro. En Castilla-La Mancha los sanchistas encabezan la candidatura a las generales por Albacete, en la persona del actual delegado del Gobierno, Manuel González Ramos y por Guadalajara, en la de la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio. Pero además, los sanchistas han colocado al actual presidente de la Diputación de Albacete como cabeza de lista en las regionales. Es un juego de pesos y contrapesos que está por ver cómo se resuelve en función de los resultados electorales. Se contemplan todas las hipótesis, con independencia de su mayor o menor grado de probabilidad, incluida la de la pérdida del gobierno de Castilla-La Mancha por parte de García-Page.

La asignatura pendiente en el PP

En el caso del PP todavía está por resolver la herida que dejó las primarias regionales en Toledo y especialmente con Carlos Velázquez, que lideró la candidatura rival a Núñez. De momento, no se le ha dado salida, lo que puede precipitar su salida. Además, el PP apura los tiempos para dar a conocer las candidaturas. Las nacionales por ley se deben conocer entre el 20 y el 25 de enero, que es el plazo oficial para formalizarlas en las juntas electorales. Las regionales y municipales tienen un mes más de plazo. Es una estrategia nacional para tratar de evitar que otras formaciones (especialmente Ciudadanos y Vox) pesquen en los descartes, como hizo el partido de Rivera en Castilla y León y en otras Comunidades.

Los movimientos en Ciudadanos

Precisamente la operación de Castilla y León desveló un fuerte desencuentro entre líderes nacionales de la formación naranja. Por un lado el secretario general, José Manuel Villegas, y el portavoz parlamentario, Juan Carlos Girauta, aparecían en la foto dando su apoyo a la expopular Silvia Clemente, mientras que el secretario de economía y empleo de la formación, Luis Garicano, y el secretario de organización, Fran Hervías, lo hacían dando su apoyo al presidente del partido en León, Francisco Igea. Las primarias en esa comunidad han puesto de manifiesto las diversas sensibilidades dentro del aparato nacional de Ciudadanos y sus movimientos para fortalecerse de cara al futuro.

En el círculo reducido de la Presidencia del Gobierno de Castilla-La Mancha en diciembre ya se daba por seguro que Juan Carlos Girauta, portavoz de C’s en el Congreso de los Diputados y con escaño por Barcelona venía a Castilla-La Mancha a liderar. Alguien había soplado el desplazamiento de Girauta desde Cataluña a Castilla-La Mancha. En el círculo del presidente García-Page, barajaron la posibilidad de que la operación estuviera encaminada a presentarle como candidato a la Junta de Comunidades. Desde esas fechas, ya se baraja ese escenario y el relevo de la candidata natural, Orlena de Miguel, portavoz de C’s en nuestra Comunidad. Desde esa fecha, clm21.es sigue el hilo y el último día de febrero desvela que finalmente sí se producirá relevo en la candidatura oficialista de primarias y que Carmen Picazo es la respaldada. No es Girauta, cuya llegada a Castilla-La Mancha empieza a interpretarse en clave interna de cara a ese futuro y sobre su posible ascendencia en el partido a nivel regional. Él encabezará la lista de Ciudadanos al Congreso de los diputados por Toledo, localidad en la que tiene residencia y que en el momento en el que se plantea el cambio de domicilio, provincia por la que C’s obtendría escaño.

La crisis en Podemos, destapa los nervios

En Podemos, en cambio, la diputada nacional Gloria Elizo se vuelve a Madrid porque en Toledo los números no le dan. En los morados hay nervios de cara a los resultados de nacionales y regionales. Tienen dos diputados nacionales (Toledo y Albacete) y otros dos regionales (Toledo y Guadalajara). La crisis interna a nivel nacional y los enfrentamientos y purgas también en la región han terminado por ennegrecer sus perspectivas electorales.

A García-Page se le cae la muleta por la izquierda y trata de buscar nuevo apoyo por su derecha. Un apoyo que pueda servirle para entendimientos futuros a nivel nacional, toda vez que Rivera y Ciudadanos han dicho que no pactan con Sánchez ni con el PSOE de Sánchez y en cambio no cierran la puerta en Castilla-La Mancha, Extremadura o Aragón.