La aceleración de los precios en la región en los últimos 12 meses se deja sentir especialmente en los costes de la vivienda, el agua, electricidad, gas y otros combustibles, con un incremento acumulado del 2,8% y en el transporte del 2,5%. Dentro de los costes de la vivienda, los de electricidad y gas son los que tienen una mayor subida, con un porcentaje del 4,6 anual.
En marzo le tocó la subida a la ropa y al calzado, especialmente la dirigida al público masculino y a los niños. Así las prendas para hombre subieron un 6,5% y los zapatos un 6,8%, mientras que el calzado infantil subió un 6,7%. La subida llega tras el cierre de la temporada de rebajas, lo que deja la variación anual en un 0,8%, seis décimas por debajo del índice general de la inflación regional.
Y aunque los alimentos han subido un 1,1%, a un ritmo menor que el conjunto de la cesta de la compra, algunos se han disparado. En el último año el precio de las patatas ha subido un 20,3%, el de las legumbres y hortalizas frescas un 7,3% y el de las frutas frescas un 3,5%. En el caso de las patatas tan sólo en los tres últimos meses la subida ha sido del 7,4%. Y es que en lo que llevamos de año, de enero a marzo, algunos productos crecen por encima del 2%. En este grupo están el azúcar, el agua mineral y los refrescos y las legumbres y hortalizas.
Entre los productos de la cesta de la compra que han bajado sus precios en el último año destacan el aceite (13,8%), las frutas en conserva o los muebles.
A nivel nacional, la tasa de variación anual de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) se mantiene en el 0,7%, y se sitúa seis décimas por debajo de la del IPC general.