Fondos retenidos por el Estado, peor liquidación de la financiación 2017 y aumento del gasto disparan el déficit de las Comunidades

Si el año pasado a estas mismas alturas, los ingresos de la Comunidad crecían del orden del 6,13%, este año lo hacen un 1,7%. En cambio los gastos aumentan al 9,4%, mientras que a finales de agosto de 2018 lo hacían un 5,6%. Este aumento del gasto total tiene su reflejo en el gasto que se estima para establecer la denominada regla de gasto y que establece que esas partidas no pueden crecer más de un 2,7% durante 2019. Es una medida fijada por el gobierno central para tratar de mantener la estabilidad presupuestaria y la sostenibilidad financiera de las administraciones públicas. En lo que llevamos de año, Castilla-La Mancha presenta un crecimiento de ese gasto del 7,7%, el segundo más alto del país, tras Extremadura que se mueve en el 8,4%. Ambas regiones son las que mayor porcentaje de déficit presentan. La cuantía de Castilla-La Mancha representa la sexta parte del total autonómico. El conjunto autonómico, lo hace en el 4,8%. Sólo tres Comunidades: Andalucía, Baleares y La Rioja mantienen una evolución de su gasto por debajo de ese 2,7%.

Hasta finales de agosto de 2019, el déficit de la Administración Regional ha ascendido a 2.576 millones, mientras que en el mismo periodo de 2018 el resultado positivo fue de 1.092 millones. En términos del PIB, la ratio déficit/PIB en agosto de 2019 es de 0,21 puntos, mientras que en 2018 se obtuvo un superávit/PIB de 0,09 puntos. Esta evolución se debe a un crecimiento de los recursos del 2,2%, 2.595 millones más que en el mismo periodo de 2018, frente a un crecimiento del gasto del 5,4%, 6.263 millones. Señalar que en el periodo de referencia los ingresos que se están comparando no son homogéneos, porque el Estado a esa fecha retenía la actualización de la actualización de las entregas a cuenta y no había distribuido tampoco el dinero procedente del tipo impositivo autonómico del Impuesto Especial sobre Hidrocarburos (IEH).

El tercer motivo de la debilidad del comportamiento de los ingresos es la menor liquidación de la financiación de 2017. En 2019, las Comunidades han recibido 2.752 millones de euros menos que en 2018 por la liquidación de la financiación anual correspondiente.

En el caso de Castilla-La Mancha, además se suma fundamentalmente la caída de la recaudación en el impuesto de sucesiones y donaciones del 10,7%.