Por lo que respecta al IPC general, en Castilla-La Mancha la bajada del 1,4% interanual (-1,9 en el acumulado de los cinco primeros meses de 2020), se debe fundamentalmente a la caída del gas, electricidad y gasóleo doméstico (-10,8%) y el gasto familiar en transporte (-8,3%), mientras las mayores subidas se la anotan el sector de alimentación, en el que los precios se han incrementado un 3,6% en el último año
La tasa anual del IPC disminuye en todas las comunidades autónomas en mayo respecto a abril, excepto en Canarias, donde se mantiene. Los mayores descensos se producen en Principado de Asturias y Cantabria, con una bajada de cuatro décimas en ambas. Aragón y Extremadura son las comunidades donde menos disminuye la tasa anual, con un descenso de una décima en las dos.
IPC especial COVID
Sin embargo y dada la situación especial en el mercado de bienes y servicios por la pandemia, el Instituto Nacional de Estadística mantiene un IPC diferenciado y ha calculado dos agregaciones especiales, Bienes COVID-19 y Servicios COVID-19, que muestran la evolución de los bienes y servicios que los hogares adquirieron con mayor frecuencia durante el mes de mayo. Los Bienes COVID-19 incluyen productos de alimentación, bebidas, tabaco, limpieza y artículos no duraderos para el hogar, productos farmacéuticos, comida para animales y artículos para el cuidado personal.
Por su parte, los Servicios COVID-19 contienen servicios de alquiler de vivienda y garaje, la distribución de agua, alcantarillado, recogida de basuras, gastos comunitarios, electricidad, gas, gasóleo para calefacción, servicios de telefonía, música y televisión en streaming, seguros, comisiones bancarias y servicios funerarios.
La tasa anual de los Bienes COVID-19 se sitúa en el 2,8% en mayo, tres décimas menos que el mes anterior. Por su parte, la variación anual de los Servicios COVID-19 aumenta cuatro décimas y se sitúa en el –4,0%. Los productos que destacan por su influencia en los Bienes COVID-19 son los alimentos no elaborados, cuya tasa alcanza el 5,4%, un punto y medio menos que la registrada en abril. Entre ellos sobresalen las bajadas de los precios del pescado fresco y las carnes de porcino y de ave, frente a las subidas registradas en 2019. También influye que los precios de las legumbres y hortalizas frescas, excepto patatas, bajan este mes más de lo que lo hicieron el año pasado. Por su parte, el incremento de la tasa anual de los Servicios COVID-19 se debe al aumento de los precios de la electricidad este mes, que descendieron en 2019.