Phone House, nueva víctima de la pandemia: 435 despidos y cierra la mitad de sus tiendas propias

Dedicada principalmente a la venta de teléfonos móviles y gadgets tecnológicos, y con negocios residuales de seguros y contratos de energía, Phone House lleva semanas perfilando la ejecución de un Expediente de Regulación de Empleo. Si bien en un principio se planteaban más de quinientos despidos entre las filas de la compañía, finalmente el acuerdo alcanzado implica el cierre de la mitad de los establecimientos propios de la compañía y 435 despidos.

Tras una ardua negociación, los empleados afectados por el ERE de Phone House recibirán una indemnización de 30 días por año trabajados, en hasta 17 mensualidades y por un importe máximo de 48.000 euros, según recoge EconomíaDigital.

Cabe destacar que el ERE afectará únicamente a los establecimientos propios de la compañía y no sus franquicias, que suman más de 250 establecimientos. De hecho, Phone House ha manifestado su intención de potenciar el negocio franquiciado, instando a los empleados afectados por el expediente de regulación a seguir vinculados con la compañía iniciando este modelo de negocio.

En Castilla-La Mancha son 18 los establecimientos que Phone House tiene repartidos por la región. Ciudad Real y Toledo son las provincias que más tiendas tienen, con 6 locales cada una (Almagro,dos en Ciudad Real capital, Valdepeñas, Puertollano, Tomelloso, Alcázar de San Juan, Talavera de la Reina, dos en Toledo capital, Illescas, Villacañas y Quintanar de la Orden). En Albacete hay tres establecimientos PH (Villarrobledo, dos en Albacete capital, Hellín y Almansa), en Cuenca dos (Cuenca y Tarancón) y uno en Guadalajara.

De todos estos establecimientos en la región, se verán afectados aquellos que pertenezcan directamente a la matriz.

Phone House pertenece a Global Dominion, una empresa global de servicios multitecnicos y de soluciones de ingeniería especializada que cotiza en Bolsa. En 2019 la compañía telefónica registró ventas por valor de 259,3 millones de euros, casi un 25% menos que en el ejercicio anterior. Su resultado el año pasado dejó un balance negativo de -8,3 millones de euros y una EBITDA de -2,159 millones. Todo ello antes de la pandemia.