De hecho, la industria ya está en valores positivos. Su índice está en los valores más altos desde julio de 2008 tras registrar un avance medio en el primer trimestre del año del 1,8%. Antes del estallido de la pandemia, el sector ya había notado la desaceleración de la economía, lo que había llevado su evolución al rojo en enero del año pasado.
En abril del año pasado se produjo un gran desplome de ventas con el cese de la actividad no esencial. La facturación cayó un 40% interanual y la debilidad en junio agravó aún más los resultados medios del año.
Eliminando los efectos estacionales y de calendario, la variación mensual del Índice general de Cifra de Negocios Empresarial (ICNE) entre los meses de marzo y febrero de 2021, ha sido 2,8%. Esta tasa es 2,1 puntos superior a la del mes anterior. Los cuatro sectores analizados presentan tasas mensuales positivas. Los mayores aumentos se dan en el comercio (7,0%) y el suministro de energía eléctrica y agua, saneamiento y gestión de residuos (6,8%).
Son las empresas auxiliares del sector servicios las que todavía no terminan de recuperar ingresos y mantienen una caída media en lo que va de año del -12,5%