El Índice de Precios de Consumo (IPC) cayó un 0,7% en julio en relación al mes anterior y situó su tasa interanual en el 2,9%, dos décimas por encima de la de junio y la tasa más alta desde febrero de 2017, según los datos avanzados publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En rueda de prensa, el secretario de Estado ha explicado que esta subida de dos décimas tiene que ver, de nuevo, con el efecto base por las caídas que se produjeron durante los meses centrales del año pasado, que ya en parte se anticipaba, además de por el efecto de los precios de la energía y materias primas.
"Seguimos pensando que este dato no introduce ningún elemento nuevo para no pensar que este aumento de los precios es temporal", ha remarcado. Con el dato de julio, el IPC interanual encadena su séptima tasa positiva consecutiva y continúa en sus niveles más altos desde 2017.
Según Estadística, en el dato interanual de julio influyeron los servicios de alojamiento y el gas, cuyos precios aumentaron este mes frente a las bajadas del año pasado, y los alimentos y bebidas no alcohólicas, que disminuyeron más en julio de 2020 que este mes.
Destaca también, aunque en sentido contrario, la bajada de los precios de la electricidad, frente al aumento registrado en julio del año pasado.
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