Los ingresos entre enero y junio fueron de 5.810 millones de dólares (5.784 millones de euros), algo más del doble (+132%). Por segmentos de negocio, las ventas de gas natural licuado se elevaron un 127%, hasta 4.105 millones (4.087 millones de euros), mientras que los ingresos por venta de petróleo crudo y condensados se situaron en 1.309 millones de dólares (1.303 millones de euros), un 131% más.
Este incremento en la facturación se debe al incremento de los precios energéticos a nivel mundial, ya que los volúmenes de venta de gas fueron de 47,8 millones de barriles equivalentes de petróleo, un 5% más que en el primer semestre de 2021. Los volúmenes de líquidos se elevaron un 40%, hasta 11,8 millones de barriles equivalentes de petróleo.
Los costes asociados a las ventas entre enero y junio fueron de 2.238 millones (2.228 millones de euros), un 45,8% más, mientras que el resto de gastos operativos fueron de 1.093 millones (1.088 millones de euros), casi el triple.