Según los datos el Observatorio español del Mercado del Vino, Japón aumentó un 18,6% el valor de sus importaciones de vino en el primer trimestre de 2023, hasta alcanzar los 56.202 millones de yenes (357 millones de euros), récord histórico para este periodo del año, al subir el precio medio un 26% hasta los 1.012 yenes/litro (6,43 euros/litro). El volumen adquirido cayó un 5,9%, hasta los 55,5 millones de litros. Chile en volumen y Francia en valor son sus principales proveedores, mientras que España ha logrado aumentar la factura, a pesar de la caída de ventas en volumen. El año pasado, el país aumentó sus importaciones de vino un 8,9% en volumen y un 31% en valor.
Por su parte, China redujo sus importaciones de vino en el primer trimestre de 2023 alrededor del 31% en volumen y del 15% en valor, hasta los 57,6 millones de litros y los 1.887 millones de yuanes. Estos son los peores datos para este periodo del año desde 2010. Las compras chinas vienen cayendo de forma drástica desde que batieran récords en 2017. Todos los tipos de vino cayeron a doble dígito tanto en términos de valor como de volumen.
China redujo sus importaciones de vino en 2022 un 20,6% en volumen y un 11% en valor, hasta los 337 millones de litros y los 9.693 millones de yuanes. Tras alcanzar sus máximos históricos en 2017, las compras chinas enlazaron 3 años pésimos (2018-2020); en 2021 se apreció un atisbo de recuperación, pero la gran incertidumbre comercial de 2022 provocó de nuevo una fortísima caída. Desde el récord de 2017, las importaciones chinas han caído un 55% en volumen, pasando de 751 a 337 millones de litros.
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