Ya son más de tres millones de trabajadores los que conforman el sector público. Ante la volatilidad de la situación económica desde la pandemia, las Administraciones Públicas se han convertido en el objeto de deseo de muchos españoles. Las ventajas tanto laborales como salariales que ofrece la función pública ha hecho engrosar sus filas en los últimos años, pero no todos los funcionarios tienen los mismos sueldos en puestos de igual nivel. La brecha salarial de los funcionarios es tal que, según destaca CSIF, hay hasta 19.000 euros de diferencia entre los mejor pagados (Cataluña, País Vasco) y los peor pagados (Galicia).

Esta diferencia se deja sentir también en Castilla-La Mancha, donde cualquier empleado de la función pública dependiente de la comunidad autónoma, en cualquier nivel, está mejor retribuido que un funcionario dependiente de la AGE.
Tanto es así que, en la mayor escala de la función pública, el grupo A1-28, la retribución media de la región es de 56.697,68 euros al año frente a los 49150,64 euros anuales de la Administración General del Estado. Más de 7.500 euros de diferencia de uno a otro.
Pero la mayor diferencia la encontramos en el grupo C1-18 en una de las escalas más bajas y de las más demandadas, correspondiente al cuerpo de administrativos. Aquí la diferencia salarial entre Castilla-La Mancha y la AGE es del 19,4%.
Movilizaciones para eliminar la brecha
En términos generales y de acuerdo con los datos distribuidos por el sindicato CSIF, los empleados públicos de la AGE cobran de media 8.000 euros menos al año que los trabajadores de comunidades autónomas y Ayuntamientos por el mismo trabajo.
De esta forma, la equiparación salarial para los funcionarios estatales se ha convertido en una de las reivindicaciones del sindicato, que ha convocado movilizaciones ante el Ministerio de Hacienda y las subdelegaciones de Gobierno de todas las provincias para los próximos 11 de noviembre y 16 de diciembre. Según los cálculos del sindicato, harían falta 1.487 millones de euros repartidos en tres años (2025, 2026 y 2027) hasta lograr la igualdad salarial plena en 2028.