De las facturas que la Junta tenía pendientes de abono, 98 millones eran de proveedores sanitarios y el resto (58 millones) con el resto de prestadoras de bienes y servicios.
En su conjunto, las comunidades autónomas debían a sus proveedores a finales del año pasado 5.810 millones de euros, el equivalente al 0,50% del PIB. A esa deuda hay que sumar la que tenía con beneficiarios de ayudas y convenios que sumaban otros 7.323 millones de euros, con lo que la deuda no financiera de los gobiernos autonómicos era de 13.133 millones de euros, el 1,20% del PIB, habiéndose incrementado en 3.130 millones(31,29%) respecto a un año antes.
Durante el mes de diciembre, la Junta aumentó en un 50% el tiempo de pago a sus proveedores hasta alcanzar los 15,46 días oficiales (45,46 días naturales). El conjunto de las Comunidades Autónomas cerró el año con un Periodo Medio de Pago a proveedores (PMP) de 11,50 días oficiales (41,50 naturales). Castilla-La Mancha terminó diciembre como la duodécima región española en agilidad del pago de sus facturas. El PMP regional se aumentó ininterrumpidamente durante los últimos cuatro meses del año desde los 6,76 días que se contabilizaban en septiembre hasta los 15,46 de diciembre.