El gobierno de España a lo más que llega es a facilitar que las Comunidades Autónomas se puedan endeudar más para cubrir los servicios básicos. Un endeudamiento que siguen rechazando las regiones en las que gobierna el Partido Popular, porque tal y como decía el consejero de Hacienda de Murcia a la salida del Consejo de Política Fiscal y Financiera celebrado esta mañana, “no necesitamos más deuda". Y lo explicaba su compañera de Castilla y León, Pilar del Olmo porque “al final la deuda hay que pagarla. Es dinero que se debe y tendremos que pagarlo más tarde o más temprano”. Ambos coincidían en sus declaraciones: necesitamos más financiación.
En el Consejo de Política Fiscal y Financiera, el Ejecutivo Regional se centra en cubrir las deficiencias de financiación con más deuda.
Frente a esta postura, las regiones gobernadas por el PSOE se han olvidado de la nueva financiación y han recriminado al PP que no apoyaran la nueva senda de estabilidad presupuestaria que permitía a las Comunidades Autónomas elevar su déficit en dos décimas en 2019, lo que suponía endeudarse por 2.500 millones de euros para realizar sus políticas. Esa senda tampoco contó con el apoyo de Podemos, que se abstuvo en la votación en el Congreso de los Diputados.
Ruiz Molina afea a Podemos su abstención
De ahí que el titular de Hacienda del gobierno de coalición de Castilla-La Mancha, Juan Alfonso Ruiz Molina, haya afeado a Podemos su postura. Y ha mandado un mensaje a sus compañeros de gobierno regional: “es incompatible solicitar un incremento del gasto y al mismo tiempo abstenerse en la votación que permitía flexibilizar el déficit”.
El más moderado dentro de las filas de los gobiernos presididos por el PSOE ha sido el titular de la Comunidad Valenciana, Vicente Soler, que ha reconocido la debilidad del actual modelo de financiación, que genera infrafinanciación que ha derivado en una gran deuda acumulada.
Era algo en lo que estaban de acuerdo tanto los gobiernos del PP como del PSOE. Y lo pusieron de manifiesto con una reunión que celebraron en León el 19 de febrero los presidentes de Galicia, y Castilla y León del Partido Popular y Asturias y Aragón del Partido Socialista, donde firmaron un acuerdo sobre financiación autonómica en el que se recogía la “necesidad perentoria de defender como prioritaria la definición del nuevo modelo de financiación autonómica”, una cuestión que debe abordarse “de forma inmediata” para poder garantizar la prestación de los servicios fundamentales por parte de las comunidades autónomas.
Precisamente, el presidente de Asturias, Javier Fernández, mantuvo ese mensaje en su reunión con Pedro Sánchez.
Todas las Comunidades saben que aunque soportan el mayor coste de la prestación de servicios públicos, su parte en la tarta del dinero apenas llega al 30%, mientras que el gobierno central se queda con el 50%. Todos quieren reducir esa diferencia y hacerlo con un nuevo sistema de financiación, donde no sólo se hable del reparto del dinero entre las Comunidades, sino de aumentar ese dinero, lo que, en principio, beneficiaría a todas las regiones.
El motor gripado
Lo había dicho el número dos del PSOE castellano-manchego el día en el que presentaron la campaña “Por una financiación justa”: “vamos con un motor gripado en el proceso de recuperación social y económica, precisamente porque desde el Gobierno de Rajoy (que era quien gobernaba el 9 de febrero) no nos garantiza a todos los españoles la igualdad de financiación y que a la postre es la que garantiza la igualdad de oportunidades”.
La campaña que se inició con un acto público en Puertollano, se vio reforzada desde el gobierno regional. Su consejero de Hacienda presentó un informe técnico en el que valoraba la deuda histórica del Gobierno nacional con Castilla-La Mancha por esa infrafinanciación presupuestaria por encima de los 8.000 millones de euros tan sólo en el periodo entre 2009 y 2015. Esa sería el dinero que Castilla-La Mancha ha dejado de ingresar por culpa del modelo vigente que fue aprobado por el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en 2009 y contó con el visto bueno del gobierno regional, entonces también socialista
El comunicado del acto de lanzamiento de la campaña y del vídeo señala que Sergio Gutiérrez apuntó que lo único que están pidiendo es “que se cumpla la ley porque el Gobierno de Rajoy lleva más de seis años incumpliéndola desde que caducó el marco normativo de financiación autonómica”.
El Plan Económico-financiero que ha tenido que elaborar el gobierno regional por su incumplimiento del objetivo de déficit y de la regla del gasto es considerado idóneo.
En la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera se declarados idóneos los planes de ajuste realizados por las Comunidades Autónomas incumplidoras de las reglas de estabilidad, entre ellos el de Castilla-La Mancha.
Las entregas a cuenta para 2019
Pero, además se han conocido algunas de las cifras sobre la financiación autonómica para 2019 a fin de que los diferentes gobiernos puezan ir preparando sus proyectos de presupuestos. Cataluña, que no estaba presente en la sesión porque prefiere una negociación bilateral, inicialmente recibirá 20.157,89 millones de euros, un 5,16% más de lo percibido en 2018. De ese dinero 19.019,11 millones serán mediante anticipos a cuenta, con un alza del 7,77%. Los otros 1.263,57 millones se corresponden con la previsión de liquidación del 2017. Ha sido el único dato regionalizado que ha trascendido. El comunicado del Ministerio se refiere al conjunto de todas las Comunidades y señala que “El volumen de recursos netos que, como financiación total, recibirán las Comunidades y Ciudades Autónomas ascenderá a 108.058 millones de euros. Esta cifra supone un incremento de 4.161,6 millones de euros respecto a los recursos que están percibiendo en 2018. Del importe total señalado, las entregas a cuenta representan la mayor parte sumando 102.920,5 millones de euros, lo que supone un incremento de 6.938,8 millones de euros respecto a 2018, es decir, un incremento del 7,23%”.
A la hora de cerrar esta información, el gobierno regional no ha hecho público los datos sobre las entregas a cuenta que recibirá Castilla-la Mancha y la previsión de los ingresos por la liquidación de los ejercicios anteriores. En 2018, las entregas a cuenta de los recursos del sistema de financiación que recibirá castilla-La Mancha serán 4.627,79 millones de euros, según el documento oficial que publica el Ministerio y en el que la cifra total general de las Comunidades es de 95.919,45 millones de euros (no los 102.920,5 que figuran en la información difundida hoy por el Ministerio).
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